Nada atestigua mejor el sublime poder de la naturaleza que un terremoto. En un mero abrir y cerrar de ojos, y con una advertencia mínima, la tierra desata fuerzas incomparables.

 

 

Los cimientos mejor colocados de una civilización se pueden nivelar en un santiamén. Los edificios a menudo se derrumban, aplastando a la gente y destruyendo el patrimonio cultural, en medio de la caída de piedras y escombros.

Por ejemplo, el terremoto de Cachemira de octubre de 2005 midió 7,6 en la escala de Richter. Destruyó más de 30,000 estructuras y mató a aproximadamente 79,000 personas (dato de Enciclopedia Británica). Y en China, el terremoto de Sichuan de 2008 dejó a 5 millones de personas sin hogar casi instantáneamente, con una sacudida de 7,9.

 

 

Otros temblores sísmicos devastadores (a veces junto con tsunamis) han tenido lugar en Haití, Perú, Japón y la cuenca del Océano Índico en los últimos años.

Debido a que estos desastres naturales resultan tan difíciles de predecir, cuando golpean áreas densamente pobladas, dejan un camino de destrucción sin igual a su paso. Además, cuando el suelo comienza a retumbar y rodar, encontrar un espacio seguro para escapar puede resultar un desafío, por decir lo menos.

 

 

 

El día más mortífero de la Historia

Pero cuando se trata del día más mortífero en la historia de la humanidad, un evento se destaca del resto: el terremoto del siglo XVI que causó estragos en la "Cuna de la Civilización China" en las provincias de Shaanxi y Shanxi. Este temblor creó un efecto dominó de desastres naturales que heriría el corazón y el alma de la China imperial. Esto es lo que necesita saber sobre este momento catastrófico en la historia humana y sus impactantes consecuencias.

 

Es difícil cuantificar la importancia del centro de China, y más específicamente de las provincias de Shaanxi y Shanxi, para el desarrollo de la civilización china. El Centro de Ciudades Habitables explica que Shaanxi se jactó de Xi'an, una capital floreciente que sirvió como sede de la administración imperial durante 13 dinastías. Pero el encanto magnético del centro metropolitano no terminó ahí.

 

Xi'an también representó un punto de partida para la Ruta de la Seda, conectando una red de rutas comerciales que se extiende desde el Medio Oriente hasta Asia Central y otras regiones de China. Ubicada en el río Weihe, el área contiene innumerables sitios arqueológicos. El más antiguo de estos se remonta a hace 600.000 años, cuando las comunidades neolíticas adoptaron por primera vez la agricultura, adoptando un estilo de vida sedentario en el proceso.

 

En la Edad Media, Xi'an era reconocida como una de las metrópolis más grandes del mundo.

 

 

 

Muchos se refieren a Xi'an y los alrededores de Shaanxi como la "cuna de la civilización china", y con razón. Esta área contiene artefactos y monumentos increíbles para probar su derecho a ese título, desde la Gran Pagoda del Ganso Salvaje en Dayanta hasta las Estelas del Bosque de Beilin y el Campanario en Zhonglou.

Pero quizás el sitio histórico más famoso de la región sigue siendo el Ejército de terracota de Qin Shi Huang, una colección de guerreros de tamaño natural en formación de batalla, preparados para proteger perpetuamente la tumba del emperador Qin.

 

 

Pero a pesar de todos los avances en Shaanxi y Shanxi, ninguna de las provincias demostró ser invencible en lo que respecta a los desastres naturales, una vulnerabilidad compartida con los asentamientos contemporáneos en la actualidad.

 

Fue un jueves de enero …

El 23 de enero de 1556, un gran terremoto y réplicas sacudieron la prosperidad de las provincias de Shaanxi y Shanxi, según informa History. A raíz de la catástrofe sísmica, una cadena de eventos que incluyeron incendios, fisuras en el suelo, deslizamientos de tierra y deslizamientos de tierra contribuyeron a un número incalculable de muertes. Para aquellos que sobrevivieron al evento, experimentaron una pesadilla viviente tras otra, representando una tormenta perfecta de destrucción.

 

 

Si bien estimar las cifras de víctimas de hace tanto tiempo resulta notoriamente difícil, la mayoría de los estudiosos coinciden en que aproximadamente 830.000 personas perecieron, lo que lo convierte en un evento de muerte sin precedentes y "el más mortífero de todos los tiempos".

 

 

 

 

Para dar un poco de contexto a este número, considere el número de muertos atribuido a la Guerra Civil Estadounidense, por mucho, el conflicto más sangriento de la Historia, el número final de víctimas en 750.000 durante cuatro años. Ahora agregue 80,000 a la cifra y reduzca el marco de tiempo en gran medida, y comenzará a comprender la magnitud de los trágicos eventos en Shaanxi y Shanxi.

Lo más alarmante de este desastre natural es el hecho de que los temblores iniciales solo duraron unos segundos, según History Collection. Sin embargo, la increíble fuerza contribuyó a un efecto dominó mortal que devastó por completo la región y las poblaciones locales.

 

 

830 000 muertes después y más …

Después del terremoto, los sobrevivientes de la región buscaron enfoques de construcción mejores y más resistentes a los terremotos. Estos incluyeron madera y bambú, ambos materiales de construcción rentables y fácilmente disponibles. Incursionar con estos materiales de construcción tuvo diversos grados de éxito. Pero ambos demostraron ser lo suficientemente sólidos como para encontrar aplicaciones en el presente.

 

Eb esta zona de China, "el bambú se utiliza como elemento estructural predominante y el marco de bambú como sistema estructural predominante durante los terremotos". Debido a la introducción de estructuras de madera y bambú, muchas personas abandonaron las cuevas de "loess" (vivìan en cuevas talladas en las montañas) por viviendas sobre el suelo más resistentes a los temblores.

Y es fácil entender por qué cuando se considera el horror que los sobrevivientes presenciaron durante el terremoto cuando los deslizamientos de tierra masivos se estrellaron contra las viviendas de los acantilados, tambaleándose bajo la furia de la sacudida sísmica ….

 

Sin embargo, sorprendentemente, millones de chinos todavía viven en "yaodongs" hasta el día de hoy. A pesar de las lecciones aprendidas en Shaanxi, las personas empobrecidas tienen pocas opciones. Además, las viviendas en cuevas tienen una historia francamente antigua: "La topología de las cuevas es una de las primeras formas arquitectónicas humanas... surgida de la necesidad”.