Tu y tus armas en perfecta combinacion , con estrategia de pasion natural haces todo para que vaya
cayendo una vez mas entre tus manos,
rendida en voluntad, desesperada de deseos ante ti, dejandome llevar con el ritmo de tus tretas, envueltas en caricias y locura de besos.
Me tienes donde quieres,
como quieres, siendo tu presa
atrapada vencida y perdida por ti, temblando de extasis ,al dimimuto
contacto de nuestros labios y piel.
Eres el cazador de mis pasiones , en silencio que grita mi voz interior...
me declaro presa facil de tus caricias creativas, de tus coqueteos naturales, esos que haces sin darte cuenta, que me van cautivando y atrapando
Y es que eres tu ,
Esa mezcla de divino sol y cazador.
El cazador de mis ansiedades, de mis pasiones , de esos deseos insistentes
de querer vibrar en ti,
el que me vuela la cabeza con besos de altura, caricias de fuego, entrega entre lo eterno y lo incierto.
Eres el cazador divino
de mis sueños humedos, el protagonista permanente , sin intension de salida de mi serie de pasiones sin punto final.
Eres cazador de mis pasiones,
Que con sus armas, me vuela de este mundo. Y me apreta a la realidad dibujandome la sonrisa ,despues de ser vencida en ese acto, ritual tan propio que se llama hacer el amor!!
(Ariel, joven de dieciocho años, solo en su casa, sus padres vuelven hasta el jueves, ordena, limpia, con mucho ahínco, todo, menos su habitación, se le nota ansioso)
Déjenme compartir mi tristeza: estoy deprimido, estoy acabado. Mientras todos especulan cuál va a ser el destino que le corresponda e El Salvador, ahora que el Profe asuma el 1 de junio … mi preocupación es otra ….
Amor, me reventaron a patadas, bien dadas, descaradas, el árbitro no pitó nada, chanchada, casi me dan con una granada, amada; regreso a casa maltrecho, deshecho, contrahecho, no por andar de peperecho, por tu mirada sospecho, no es el hecho, no vengo de otro lecho, no es mi techo, a lo hecho pecho, es el fútbol y sus derechos, medio torcidos pero es un hecho, me reventaron el antepecho, a pelotazo de despecho