Mi nombre es Felicia, quiero que me conozcan, soy una mujer normal, nunca me he puesto el buzo amarillo de líder, no salgo del pelotón que sigue a las que encabezan la carrera, pero tampoco llego de última …

Y al igual que todas las mujeres, alguna que otra vez fingimos el orgasmo...dicen las estadísticas que un tercio de las mujeres lo hacemos, por la inutilidad de los hombres.

Pero yo, además, finjo que me gusta el fútbol... Es que a mi grupo de amigos les encanta (el fútbol quedemos claro) , así es que cuando estoy con ellos, hago como que disfruto... Aunque, sinceramente, no me entero de nada...

Que ellos gritan? Yo grito... Que se excitan? Pues me excito. Y si meten gol, hago un terrible escándalo, nos abrazamos, gritamos, hasta las lágrimas ... Igual que cuando se finge el orgasmo.

Y es que algunos hombres parece que disfrutan más con el fútbol que con el sexo. Si los escuchás siempre  están: "Métela, métela... Así, así, sigue, sigue... Aguantaa! Uyyyyyy...". Así es que pensé... "Si esto es mejor que el sexo, yo lo tengo que probar...".

Y decidí hacerme futbolera. Pero no es tan fácil. Por ejemplo, no hay ningún libro que te enseñe a entender las alineaciones o las tablas de posiciones de El Gráfico (que además, ya descubrí, siempre están desactualizadas)  ... donde, en que enciclopedia me pueden aclarar que Pasaquina es un equipo de fútbol y no una ciudad?... Y que un "interior izquierda" y un "exterior derecha" no son habitaciones de un proyecto arquitectónico a la venta … O que un extremo derecha no es un neo nazi, que hoy están tan de moda...

Necesito que me expliquen en términos sencillos, porqué los hombres lloran a cántaros cuando su equipo pierde, pero no derraman una lágrima si los deja su mujer; desde el borde de la cancha gritan como locos dando indicaciones a su hijo si está jugando, enfermizamente, pero no le paran más de cinco segundos de atención a la boleta de calificaciones del mismo niño.

Visto lo visto, llamé a mi amigo Marcos y le dije: "Marcos... finjo los goles... Quiero sentir lo que tú sientes...". Y Marcos me dijo: "lo sentirás, te voy a llevar a un partido que vas a gozar". Y me llevó a la final de la Liga Mayor, Águila – Dragón :

Lo primero que me llamó la atención es que si eres futbolero puedes parquearte donde te  ronquen las ganas: "

-          Marcos, estamos parqueados en un paso cebra, en un puesto para discapacitados, tapando una venta de riguas y en la salida de emergencia de la cancha... Y si viene la grúa?. "

-          La grúa? Ahí la tenés, atravesada tapando la salida de ambulancias del hospital – me contestó Marcos.

Otra cosa que puedes hacer si eres futbolero es vestirte de mamarracho... Tú vas al fútbol y a nadie le llama atención que te pongas unas plumas y una máscara de águila, o que te pintes la cara como Braveheart... Incluso podemos estar en verano, muertos de calor y todos van con bufanda de su equipo.

En ese momento mi amigo Marcos me dijo:

-          Felicia, va a empezar el partido ya, nos vamos a cagar....

A pesar de las groserías de Marcos,igual a la de todos los hombres, a las que ya estoy acostumbrada, vi que era cierto, porque todos empezaron todos a tirar rollos de papel higiénico al campo, me dije "

-          Uyyyy, esto va en serio....

Y entonces salieron los jugadores y yo seguía sin entender nada: veinte cámaras alrededor del campo, transmisión a los USA, pantalla gigante y todos vestidos de naranja... Cómo deciden quién saca? Tirando un cinco al aire! Por favor … si es cierto que ganan miles de dólares, por lo menos que tiren una moneda de las doraditas!

Cuando miré a mi alrededor me di cuenta de que todo el mundo tenía sus audífonos, escuchando el partido por radio.

- Pero Marcos, para que gastamos cincuenta dólares en las entradas si vas a escuchar el partido por radio?"

- La radio es fundamental, escucha, escucha...". Y me puso los audífonos: Penetración por banda derecha, se acerca al borde del área, centro a la ollaaaaa... uhhhh lo que se perdió Nico Muñoz !

- Al tal Nico Muñoz como que se le perdió algo Marcos … - dije tímidamente – eso dicen en la radio.

- Y no viste el gol que se perdió ?

- No, porque estaba escuchando la radio – contesté.

Ya Marcos estaba desesperado y ofuscado, su equipo naranja no hacía goles aunque dominaba … y para colmo de males, los de verde metieron un gol … y ganaron la final !

Todo el camino de regreso Marcos no me dirigió la palabra, se ve que estaba muy enojado, pero sentí que perdi mi único amigo cuando me sentenció:

-          No te vuelvo a llevar al estadio Felicia, sos gafe, traes mala suerte … - y se fue acelerando y tronando llantas como Vin Diesel.

Así que aquí me tienen, ahora tratando de entender el baloncesto … y fingiendo orgasmos, en cada ocasión, por supuesto.

 

*Evidente parodia, hoy día hay mujeres que saben más de fútbol que la mayoría de los hombres.