En la puerta de la Iglesia, estaban todos, los amigos, los parientes, algún que otro paracaidista, cada cual compitiendo con el otro al mejor vestido ….
Muy alegres y sonrientes, elegantes pero poco inteligentes, algunos sin dientes, esperaban, todos impacientes, la llegada de los novios … que ya venían bastante retrasados, el Padre Agustín, como siempre, crujiendo los dientes, tenía esta boda a las 6 00 pm y luego una vigilia en la Parroquia de la Santa Cofradía del Corvo en Lolotique, a las 8 30 pm … como iba a llegar?
La novia llegó, al fin, bastante tarde, tardó en bajarse de la limosina, pero asomaba los pies, quizás para hacer alarde de sus rosados zapatos, baratos, se desplazó entre los invitados. “El novio no ha llegado” le susurró uno de sus parientes allegados, y esa fue su primera impresión de desagrado …
El novio no aparecía, y comenzaban por todas partes las miradas desconfiadas, que entre si intercambiaban las tías de la novia y las cuñadas, todas ellas peinadas, con bucles de circunstancia … se comenzó a formar en esas instancias, el rumor que en chambre deriva,
El tiempo siguió corriendo, sin que el novio apareciera, y la novia de repente, cambió su gesto de alguna manera, se vio venir algo horrendo, algo que frente a la gente, decente, la iba a dejar mal parada, los rumores se hicieron chambres, burlas y risitas en silencio …
Cuando se tornó evidente, que el casamiento no se haría, ya los menos indulgentes, con sus chismes y habladurías, vacías, trataban de explicarle a la novia y quien quisiera oír, sus teorías sobre el suceso.
A la novia por consuelo, la compadecían según creo, e insultaban con denuedo, al traidor de sus anhelos, por farsante y fariseo. Que feo, dejar titada a la novia.
Mas por dentro los presentes rumiaban insatisfechos, chambre va y chambre viene, sobre alguno que otro hecho, como que la novia tal parece, muy pero muy prematuramente, lo había llamado a su lecho, bien hecho, hoy que pague las consecuencias.
De pronto llegó a la Iglesia, una noticia muy funesta, el novio se había matado, en un grave choque en la Avenida Independencia, hay velorio en vez de fiesta, orquesta, a cambiar de repertorio.
El muchacho se había muerto, ya camino al casamiento, lo mas raro de este choque violento en la Avenida, que vida, encontraron el carro destrozado pero no encontraron el cuerpo, lo siento, dijo el Padre Agustín a la novia.
Fue un original velorio, con champagne y boquitas a troche y moche, la novia lloró por el velorio, su padre lloró el derroche, más el chambre no perdona y entre pésame, arroz y champaña, una señora muy cizaña, menciono la zona donde había muerto el muchacho, dictó sentencia, el muchacho fue a entrenarse a la Avenida Independencia.
Otro fulano dijo que el finado, en un arrepentimiento, el carro había dejado abandonado, chocado contra un camión de detergente, había huído en taxi, hasta la terminal de oriente, para tomarse los vientos, cruzó a Honduras por un punto ciego …
… presiento, que este fue su pensamiento.
Mi nombre es Diang -Xiao-Ping-Ah, no hice esto por vocación, sino por necesidad …
Acabo de denunciar en el Departamento de Convivencia de la Procuraduría, a Doña Glide, que vive al lado de mi casa y tiene Alzheimer y le ha agarrado por escupir a la gente que pasa por la acera , desde la ventana.
El periodista se dirigió al oeste del país, haría un reportaje en un pueblo muy alejado de la capital, oyó que en ese pueblo nadie hurtaba o robaba algo, le pareció que era una buena historia y a la vez haría el reportaje, decidió desplazarse hacia allá para corroborar e investigar sobre ese hecho, recorrió en su auto varios kilómetros hacia el oeste, al cabo de 6 horas notó un letrero que anunciaba la llegada al pueblo, el letrero estaba en color verde las letras en color blanco justo debajo de éste otra inscripción que decía: “No Robarás”.