Noche de sábado, 9:40p.m, ciudad capital
El hijo (dieciocho años, con el ímpetu de la edad y la arrogancia propia del mismo ímpetu) se acercó al padre (cincuenta y dos años, manso, tranquilo, con la calma característica de
mas de medio siglo de experiencia en la vida).
-Papá, me voy, me llevo el carro… - el padre, levantó la vista del libro de Vargas Llosa que leía y lo miró…
-En mis épocas, al menos pedíamos permiso para usar el carro o nos despedíamos de nuestros padres de manera un poco más educada, bah …afectuosa.
-En tus épocas papá- replico el hijo- tus épocas, mi época es de sexo, rock y smartphone… tratá de entenderme…
-Bueno - replicó tranquilo el padre- mis épocas fueron de beso, twist y TV en blanco y negro, pero eso no te hace más dueño del mundo de lo que yo fui en mi época… andá, llévate el carro pero con cuidado, que la calle de noche es peligrosa y no vayas a tomar de más, menos si estás manejando el automóvil que es de hecho, un patrimonio de toda la familia, no solamente tuyo…
-Cambiá de siglo papá…! (pum, el portazo y se fue)
El padre (beso, twist y TV en blanco y negro) se quedó preguntando, para sus adentros, que habría hecho la vida con su hijo (sexo, rock y smartphone) ...
Aquel mismo que provocó la fiesta y la alegría más grandes de su vida al nacer… se preguntó si por casualidad ese joven de gorra y camiseta era el mismo por el que había luchado años y años de trabajo, tratando de hacer de él un espejo de si mismo… tal vez ahí estaba el problema, volvió a leer y se durmió.
Y el hijo (sexo, rock y smartphone) se fue manejando preguntándose a sí mismo, si ese señor calvo de anteojos y espalda encorvada era el mismo que él juraba, ante sus amigos que era mas fuerte que todos los papás del vecindario a los cinco años.
Si ese casi viejo era el mismo que él había soñado alguna vez, que volaba como Superman y lo salvaba de los monstruos intergalácticos… volvió a lo suyo… y aceleró…
El teléfono sonó a las tres y poquito de la madrugada anunciando el accidente, carro volcado, destrozado, el hijo (sexo, rock y smartphone) malherido en el hospital y el padre (beso, twist y TV en blanco y negro) salió de su casa cortando la noche con angustia a flor de corazón…
Cuando lo vio, entubado en el hospital, en medio de un estado de semi consciencia, quien temblaba y convlsionaba en esa camilla, era quien y reconoció tal cual, su hijo, su niño, con sondas y sueros y vendas y médicos… los ojos se le habían puesto muy buenos… con dos lagunas de lágrimas a manera de ojos …
… miró y distinguió a ese señor anticuado y calvo…su padre
… y se aferró a la mano de su Papá (beso, twist y TV en blanco y negro)
fuerte …
como quien se aferra… a la vida…
Malhaya la hora en que se me ocurrió acuñar aquello de que “si no es sufriendo … no es Firpo” porque en cuanto a sufrimientos, hermanos pamperos, estos últimos dos años … rebalsamos la vara.
Hubiera sido eso, simplemente, una fotografía ínfima en el periódico, con un pie de página cualquiera, de los que hablan de cualquier conflicto empresarial o análisis financiero del país, porque ahí apareció, en finanzas, no en espectáculos ni en la lista de morosos ... no, en finanzas y negocios
Y me hubiera importado realmente un corno, es más, ni siquiera es una fotografía grande o relevante, chiquita no más, en medio de otro tanto de fotografías chiquitas, nada destacable, con un comentario de a saber qué problema, donde varios esgrimen su opinión, una foto .. mal enfocada para colmo, pero foto al fin ...
Lunes, primer día de la semana me levantó y por la ventana del cuarto del baño que da al patio, hay un árbol de almendro, un sonido me llamo la atención, pero es el viento que sopla contra él y este emite un sonido muy peculiar, también es el hábitat de varios pájaros que se posan en éste para dar sus cantos, ese día en particular un pájaro muy pequeño aspiraba con su larga lengua el néctar de unas flores que estaban en sus ramas, su aleteo eran tan intenso y rápido que los movimientos no se podían observar, fue tan espectacular que me dejó sorprendido, baje al comedor y le dije a mi esposa: