Gobiernos van y vienen, y no pasa nada con nada, cerrado el país temporalmente … por falta de materia gis y capacidad intelectual, de ahí que a propósito de rinocerontes terminemos contando la historia de Cacareco.

1959, o sea, no es nuevo esto de la nausea que la clase política nos produce, no es excluyente de El Salvador, pasa en todo el mundo.

Ahora bien, tampoco es privativo de estos tiempos, la enorme arcada e impulso de vómito que nuestros líderes políticos nos provocan …sino, vean la enorme aceptación que tiene Fortnite por encima de cualquier espécimen de la clase política local.

Vamos a la historia que es (para mi) “madre de todas las enseñanzas” era 1959, el Gobernador de Sao Pablo (Brasil) era Adhemar de Barros, quien encabezaba una Cámara (Concejo Municipal) de deplorable actuación.

Las elecciones para la Alcaldía de Sao Paulo celebradas el 4 de octubre de 1959 las ganó un candidato que por razones de peso nunca pudo ocupar su despacho: se trataba de Cacareco, el rinoceronte del zoológico de Sao Paulo.

Quien era Cacareco ?

Hay que confesar algunas intimidades acerca del candidato Cacareco, primero, no era paulista, era de Rio de Janeiro, pero había sido traído seis meses antes de la elección, con motivo de la inauguración del zoológico de Sao Paulo.

Segundo, a pesar de su muy masculino nombre, no era rinoceronte macho, era hembra pero bue … son detalles.

Obviamente el electorado Paulista no estaba dispuesto a votar por una continuidad del Gobierno de Adhemar de Barros, lo repelían totalmente. Así que un grupo de estudiantes, fundaron un Parti Rhinoceros (Partido Rinoceronte), que fue catapultado a la notoriedad por el periodista Itaboraí Martins, pregonando la candidatura a Gobernador de Sao Paulo, balo los lemas “Vale cuanto pesa” y “Es mejor que nos gobierne un rinoceronte a un asno”, así nace la candidatura de …Cacacreco.

Y Cacareco …ganó !

Para hacerla corta, Cacareco recibió en las urnas el apoyo de más 110 mil paulistas que decidieron de esa manera manifestar su voto protesta, un voto en contra de la corrupción, la incapacidad gubernamental y la poquísima confiabilidad que les inspiraba el sistema electoral brasileño. Con el tiempo ese voto protesta pasó a denominarse el Voto Cacareco. La bancada de Adhemar de Barros, obtuvo 95 000 votos, o sea que Cacareco era el nuevo Gobernador de Sao Paulo.

Para esa época, en Sao Paulo se votaba por cédula electoral, o sea, en la papeleta, se escribía el nombre del candidato según preferencia del votante, por lo que los votos de Cacareco tuvieron que ser impugnados de alguna manera … porque según el sistema, eran válidos.

 

La mejor forma que hallaron de quitarle brillo al asunto, fue mandarlo de regreso a Río de Janeiro, dos días antes de la toma de posesión de las nuevas autoridades, por lo que el mentado rinoceronte no pudo asumir su cargo.

Gobernantes y otros animales sueltos.

Algunos años más tarde, en 1963, ese mismo espíritu detrás del voto al rinoceronte alimentó a un grupo de bromistas canadienses que refundaron el Partido Rinoceronte y candidatearon otro rinoceronte local.

Entre las propuestas de gobierno se contaban leyes como: revestir las aceras de goma para que los borrachos no se golpearan tan duro al caer, anexarse a los Estados Unidos como un estado más del territorio canadiense para así aumentar en un grado centígrado la temperatura promedio de Canadá y declarar la guerra a Bélgica porque en uno de los cómics de Tintín se asesinaba a un rinoceronte (cese de las hostilidades que se garantizaba a cambio de una caja de cerveza belga, condición que fue aceptada por la Embajada de Bélgica que envió las birras de la paz a la sede del Partido Rinoceronte).

 

Por ejemplo Pigasus, un cerdito, se candidateó en 1968, en la Convención Nacional Demócrata para Gobernador de Illinois. Fue el candidato oficial del Yippies —Partido Internacional de la Juventud—.

 

Lucy Lou, Este afelpado Border Collie se postuló para la alcaldía de Rabbit Hash, Kentucky. Tras recibir 8 mil votos, Lucy Lou se convirtió en la máxima autoridad de su pueblo.

Tiao, en Brasil, bajo la frase “Vota por el chango, vuélvete chango”, el partido criticó a la clase política de su país. El candidato del Partido del Plátano quedó en tercer lugar, pero lo triste para los votantes fue cuando se supo que Tiao era un chimpancé, que es un simio y no un chango.

Cacareco falleció en 1962, pero el “voto Cacareco” sigue siendo un aporte remanente … y necesario para hacerle entender a los políticos que es lo que preferimos los votantes, a distintos tipos de bestias.