Muchos de los mejores mitos comienzan con una premisa simple: en algún lugar, muy lejos, hay una sociedad muy diferente a la nuestra.

 

Antigua Grecia

Pensemos en lo que una persona de la Grecia antigua habría sabido sobre el mundo. Estarían algo familiarizados con culturas cercanas como Persia y Egipto; podrían haber conocido a alguien de allí, o conocer a alguien que había viajado a tales tierras. Comprenderían que estas sociedades eran bastante diferentes de la suya; su conocimiento de ellos probablemente sea una combinación de hechos, rumores y especulaciones.

 

Un griego sería vagamente consciente de que también había otras civilizaciones, en la India, por ejemplo, o en Etiopía. Estas sociedades lejanas serían esencialmente un lienzo en blanco. Los griegos podían proyectar sobre ellos las fantasías o los miedos que quisieran.

 

 

 

Uno de los mitos griegos más persistentes de una tierra lejana fue su colección de historias sobre las amazonas. A los griegos les encantaba contar historias sobre una tierra en algún lugar del este, tal vez más allá del Mar Negro, con una sociedad habitada solo por mujeres.

Y no eran cualquier mujer; las amazonas eran una raza de feroces guerreras, quizás mejores que cualquier hombre griego, con las que los más grandes héroes masculinos griegos —Heracles, Teseo, etc.— tuvieron que enfrentarse.

 

 

 

 

Puede haber habido un modelo de la vida real para los mitos de las amazonas: los arqueólogos han encontrado bastantes tumbas de mujeres guerreras escitas en Asia Central, y es posible que las amazonas se basen en historias sobre los escitas. Pero las amazonas son más proyecciones y fantasías de los griegos que la representación real de personas reales.

Aunque muchos escritores griegos antiguos se refirieron a estas mujeres como "amazonas" (que puede derivar de una palabra persa), otros autores fueron más despectivos; Heródoto las llamó “asesinos de hombres”. No es necesario ser  Sigmund Freud para comprender por qué una sociedad represivamente patriarcal y misógina como Grecia Antigua habría pasado tanto tiempo extasiado y horrorizado al mismo tiempo por la pregunta:

"¿Qué pasaría si las mujeres tuvieran poder político y militar?"

 

 

 

 

Mujeres vs Hombres

Más a menudo, los griegos crearon imágenes de hombres griegos luchando contra las amazonas. Estas escenas son tan comunes que los historiadores desarrollaron un término difícil de manejar para ellas: amazonomaquias ("peleas de amazonas"). Algunos historiadores especulan que los griegos pueden haber sustituido a las amazonas por sus enemigos de la vida real en el arte. En lugar de representar una batalla real entre griegos y persas, por ejemplo, podrían haber preferido sustituir a los persas por las amazonas (que a menudo están vestidas con ropa persa).

 

 

Aunque algunos historiadores antiguos y modernos describen a las amazonas como de un solo pecho (supuestamente para que sea más fácil disparar sus arcos), notarás que no están representadas como tales en el arte griego antiguo (aunque ocasionalmente se muestra que tienen un seno expuesto). Por lo general, se muestran como guerreros con armas ligeras, su ropa tiene un aspecto extraño como en el jarrón de arriba o se basa en representaciones de Atenea (armadura ligera) y Artemisa (vestidos delgados y sueltos).

 

 

 

 

Roma

Los romanos parecían tan cautivados por las amazonas como lo habían estado los griegos. Saquearon muchas obras de arte griegas de las amazonas y las copiaron; Se decía que el emperador Nerón estaba obsesionado con una hermosa estatua de una amazona a la que denominó "piernas encantadoras".

 

 

 

Los romanos incluso ocasionalmente organizaban concursos de gladiadores femeninos, llamando a las luchadoras "Amazonas".

Cuando los artistas del Renacimiento comenzaron a explorar el arte y las tradiciones antiguas, también se vieron fascinados por las amazonas. Los primeros artistas modernos combinaron su interés en los mitos antiguos con sus propias impresiones (y malentendidos) de civilizaciones lejanas que los exploradores europeos estaban encontrando en ese momento. El propio río Amazonas adquirió su nombre después de que el conquistador español Francisco de Orellana librara una batalla contra un duro grupo de mujeres guerreras.

 

 

 

 

Las primeras representaciones modernas de las amazonas tendían a centrarse tanto en la fascinación por el mundo antiguo y por la idea de una sociedad dirigida por mujeres, como también por las civilizaciones que los europeos estaban descubriendo y, a menudo, subyugando.

 

 

 

Cuarta oleada de Amazonas

Un cuarto período de interés por las Amazonas se produjo en el siglo XX.

A medida que las mujeres comenzaron a disfrutar de un estatus más alto en muchas sociedades, comenzaron a buscar inspiración en el mito de las amazonas. Algunos equipos deportivos femeninos se hacían llamar Amazonas. Esta es la foto del club de hockey Red Deer, Alberta Amazons de 1928:

 

 

 

 

No todos los usos de las imágenes amazónicas en el siglo XX fueron tan sanos y deliciosos como los jugadores de hockey Red Deer. Los nazis celebraron algo llamado la "Noche de las Amazonas" durante varios años a fines de la década de 1930. Este evento combinó la propaganda nazi y las carreras de caballos, lo que refleja la afición de los nazis por los temas clásicos y la mitología:

 

Por supuesto, la versión moderna más famosa de las Amazonas se puede encontrar en la forma más moderna, el cómic. William Moulton Marston se propuso crear un superhéroe que reflejara a las mujeres más liberadas de la década de 1940. Su objetivo era bastante sencillo: "Crear un personaje femenino con toda la fuerza de Superman más todo el encanto de una mujer buena y hermosa".

Todos los héroes de los cómics necesitan una historia de origen, y crear una para una luchadora fuerte debe haber sido una obviedad para Marston. Por supuesto, 2.500 años después de que se originaran los mitos originales, ella sería una amazona … y así llega la Historia con la imagen de Gal Gadot caminando en una Nueva York … de 1984 …

… con poco éxito.