Ridley Scott, se ha empeñado en salvar al cine de grandes dimensiones (Laurentis, Lucas, Spielberg) del olvido y ocupar las grandes salas de cine para su impacto al espectador, antes que se conviertan en centros comerciales.

 

Por eso insiste, y lo hace bien, en una secuela de "Gladiador" 20 años después.

Partamos primero del hecho que Hollywood hace con la Historia lo que le da la gana ...

Ni Cómodo mató a Marco Aurelio que murió de fiebres en Dacia, ni Cómodo murió en la arena del Coliseo (aunque peleó varias veces con animales salvajes, bien dopados).

 

 

 

 

Marcia, su amante y Lucila su hermana, hicieron una conspiración para que Lucio Vero (esposo de Lucila) subiera al trono, y terminó en asesinato en su cama (Cómodo murió cómodo).

Lucila se casó en segundas nupcias con Claudio Pompeyano, que también quería ser emperador. Nunca se casó con algún Petronius Maximus, y murió a los 33 años.

 

 

 

 

 

Desde el Norte de África y Siria

La dinastía Severa comprendió los reinados del gran General Septimio Severo que derrotó a todos los aspirantes después de Cómodo, (193-211 d.C.), a sus hijos Geta y Caracalla (que no eran gemelos) (r. 211-217 d.C.), Macrino, el único Emperador que no fue antes senador (217-218 d.C.), Heliogábalo (un engendro criado en Siria bajo costumbres Egipcias) (218-222 d.C.) y Alejandro Severo (222- 235 d.C.).

Su fundador, Septimio Severo, era miembro de una destacada familia nativa de Leptis Magna en el norte de África que se alió con una prominente familia siria por su matrimonio con Julia Domna.

 

 

 

 

Su unión, que dio lugar a los candidatos imperiales de origen sirio, Heliogábalo y Alejandro Severo, atestiguaba el amplio derecho al voto político y el desarrollo económico del Imperio Romano. Fue Septimio Severo quien erigió el famoso arco triunfal en el Foro Romano, un importante vehículo de propaganda política que proclamó la legitimidad de la dinastía Severa y celebró las victorias del emperador contra Partia en una narrativa histórica profusamente esculpida.

 

 

 

 

Como ocurre con la mayoría de los logros artísticos de la época de los Severos, los relieves monumentales muestran una ruptura decisiva con el clasicismo que presagiaba obras de arte bizantinas y de la Antigüedad tardía. En Leptis Magna, renovó y embelleció una serie de monumentos y construyó un nuevo y grandioso complejo de templo-foro-basílica a una escala incomparable que correspondía al lugar de nacimiento del nuevo emperador.

 

Septimio cultivó el ejército con una remuneración sustancial por su total lealtad al emperador y sustituyó a los senadores por oficiales ecuestres en puestos administrativos clave. De esta manera, amplió con éxito el poder de la administración imperial en todo el imperio. Al abolir los tribunales de jurados permanentes de la época republicana, también pudo transferir el poder al poder ejecutivo del gobierno.

 

 

 

 

Su hijo, Marco Aurelio Antonino, apodado Caracalla, era el mayor de sus dos hijos y el preferido del padre, mientras Lucio Geta, iba a la sombra de su hermano, pero con mayor popularidad.

 

Caracalla eliminó todas las distinciones entre italianos y provincianos y promulgó la Constitutio Antoniniana en 212 d.C., que extendió la ciudadanía romana a todos los habitantes libres del imperio. Caracalla también fue el responsable de erigir en Roma las famosas termas que llevan su nombre. Su diseño sirvió como modelo arquitectónico para edificios públicos monumentales posteriores.

 

 

 

 

 

 

Sin embargo terminó matando a su hermano menor Geta, en un complot, y con él murieron 20 000 de sus partidarios, volviendo de Bretaña con Septimio Severo enfermo en las Saturnales del 212 de N.E

 

 

 

 

Muerte de Caracalla

Fue asesinado en 217 d.C. por un soldado de Macrino, mientras defecaba en unos arbustos al costado del camino.

 

 

Marco Ophelio Macrino gobernó entre abril del año 217 y junio de 218 tras participar en – y tal vez urdir él mismo – una conspiración para destronar a uno de los emperadores con peor fama de la historia romana: Caracalla. Fue un emperador inusual en muchos sentidos, entre ellos el que ha encendido las discusiones en las redes: su etnicidad. Y es que, aunque seguramente no tenía la piel negra, sí que era de origen africano.

 

 

 

 

 

Macrino fue el primer emperador que no fue senador. Sin la legitimidad de una línea de sangre imperial ni aristocrática, ni tampoco la aprobación del Senado, su gobierno fue inestable y desafiante desde el comienzo. Para intentar ganar popularidad, Macrino intentó revertir algunas de las políticas impopulares de Caracalla y prometió un gobierno inspirado en los ideales de Marco Aurelio, considerado uno de los mejores emperadores de Roma.

En un principio Macrino quiso sanear la economía y eliminar las reformas militares y fiscales de Caracalla. Pero inmediatamente se encontró con un problema: la guerra contra los partos por el control de Armenia, que había empezado su predecesor. El conflicto iba mal para los romanos y Macrino decidió terminarlo aceptando un acuerdo de paz que incluía el pago de 200 millones de sestercios a los partos, un dinero que no tenía.

 

 

 

Para intentar obtener fondos, decidió recortar los salarios y privilegios de las legiones, lo cual le hizo perder el apoyo de la única fuerza que lo mantenía en el poder. La situación se agravó cuando Julia Mesa, tía del difunto Caracalla, presentó a su nieto Sexto Vario Avito Basiano – el futuro emperador Heliogábalo – como heredero legítimo del emperador asesinado. En mayo de 218, la Legión III Gallica proclamó emperador a Basiano Heliogábalo en el año 218 d.C, quien traía cultos orientales, era afeminado y muy alejado de los militares de la familia Severo.

Alejandro Severo, fue el último de la línea, en el año 222 d.C. En la última fase del principado de Severo, el poder del Senado finalmente quedó dominado. se reactivó y se promulgaron una serie de reformas fiscales. Sin embargo, el defecto fatal de su último emperador fue su incapacidad para controlar el ejército, lo que finalmente condujo a un motín y su asesinato.

La muerte de Alejandro Severo marcó la era de los emperadores-soldados y casi medio siglo de guerra civil y conflictos.

Pero esto dice Ridley Scott que viene en “Gladiador 3” ,,,20 años más ?