Miss Macao no era una reina de belleza. Era un hidroavión Consolidated Modelo 28 Catalina que transportaba viajeros desde Macao, bajo control portugués, hasta Hong Kong, bajo control británico, viaje de 20 minutos en 1948.

 

Estos viajes se llamaban "vuelos de cigarrillos", ya que la duración era aproximadamente la necesaria para fumar uno, y se podía, ya que no había normas que prohibieran fumar en los aviones.

En aquel entonces, subirse a un avión "era como tomar un autobús", dice Dan Porat, profesor de historia de la Universidad Hebrea de Jerusalén. Si se lo podían permitir, los pasajeros podían comprar sus billetes al subir al avión, sin necesidad de reservar con antelación.

La Compañía de Transporte Aéreo de Macao, una filial ya desaparecida de la aerolínea insignia de Hong Kong, Cathay Pacific, operaba dos de estos hidroaviones Catalina. Como Macao no contaba con aeropuerto ni terrenos habilitados para una pista, los aviones podían despegar desde sus aguas costeras.

 

 

 

Volar se convirtió en una opción popular para los empresarios que viajaban entre ambas ciudades, especialmente para aquellos que traían artículos como oro, ya que Macao era el único mercado de oro abierto en Asia Oriental en ese momento.

Pero entonces, el 16 de julio de 1948, la Miss Macao no llegó al aeropuerto Kai Tak de Hong Kong. Las autoridades de Hong Kong dieron la alarma rápidamente y la policía local comenzó a rastrear las aguas entre ambas ciudades.

 

 

 

 

Piratería en el aire

El único superviviente, del avión caído en Pearl Estuary River, un agricultor chino de 24 años llamado Wong Yu, fue rescatado por un pescador y trasladado al hospital de Macao. Según múltiples informes de prensa de la época, Wong tenía una pierna rota y llevaba un chaleco salvavidas que había logrado agarrar mientras el avión descendía.

Aunque Wong afirmó ser un pasajero normal y explicó que el avión había explotado en el aire, las inconsistencias en su relato y su comportamiento cuestionable, incluyendo intentar escapar del hospital, llevaron a las autoridades y a la prensa a una explicación diferente: el Miss Macao se estrelló en el mar mientras era secuestrado por "piratas aéreos", un incidente "sin precedentes en la historia de la aviación".

 

El día de su último despegue, el Miss Macao tenía dos pilotos en la cabina: el capitán estadounidense Dale Cramer y el primer oficial australiano Ken McDuff, ambos exaviadores militares. En total, había 27 personas a bordo: junto a 24 pasajeros.

 

 

 

 

Sin embargo, cuatro de los pasajeros no tenían intención de ir a Hong Kong. En una confesión, Wong afirmó que él y tres compañeros aspirantes a ladrones habían vendido todas sus posesiones para comprar los billetes, pensando que las ganancias del delito valdrían la pena.

Poco después de que el avión despegara de Macao, los cuatro secuestradores entraron en acción rápidamente. Uno de ellos irrumpió en la cabina y exigió a los pilotos que cedieran el control de la aeronave.

 

 

 

Según múltiples relatos históricos, el secuestrador principal, Chiu Tok, había tomado clases de vuelo en Manila y planeaba asumir la comandancia del avión una vez que los pilotos fueran sometidos.

Sin embargo, no previó que Cramer se negaría a soltar los controles ni que habría resistencia en la cabina principal. Mientras un pasajero forcejeaba con un secuestrador, se disparó un arma. McDuff atacó a Chiu Tok con una barra de hierro. Los secuestradores dispararon a ambos pilotos y el cuerpo de Cramer aterrizó sobre el joystick del avión, haciendo que la aeronave se desplomara en el Mar de China Meridional.

 

 

 

 

 

La evolución del secuestro aéreo

 

 

 

 

 

La historia del secuestro aéreo entre Hong Kong y Macao desapareció rápidamente de los periódicos. Muchos miembros de la naciente industria de la aviación comercial lo consideraron un hecho excepcional y terrible, y no creían que el secuestro aéreo —o skyjacking, como se le conocía en su apogeo— se convertiría en algo común.

Cuando Estados Unidos creó la Administración Federal de Aviación en 1958 para regular los viajes aéreos, la legislación no mencionaba la prevención del skyjacking, lo que indicaba que aún no se consideraba un problema importante.

Los secuestradores alegaban razones políticas para apoderarse de los aviones, exigiendo pasaje hacia Vietnam del Norte, Argelia o Cuba, todos en desacuerdo con los Estados Unidos.

También ocurrió lo contrario en algunos casos. Individuos de países detrás del Telón de Acero.

Según la Universidad Hebrea de Jerusalén, el secuestro de un avión en 1968 por militantes palestinos fue "ampliamente acordado en círculos académicos como el primer acto internacional de terrorismo internacional (a través) del secuestro de un avión."Tres miembros del Frente Popular para la Liberación de Palestina tomaron el control del vuelo 426 de El Al, que viajaba de Roma a Israel, y desviaron el avión a Argelia. Los pasajeros y la tripulación no israelíes fueron autorizados a salir y abordar un avión hacia Francia, mientras que 40 hombres israelíes fueron retenidos durante 40 días antes de ser liberados a cambio de prisioneros palestinos.

Aunque todos a bordo del El Al 426 sobrevivieron, los secuestros de aviones se habían vuelto demasiado grandes para ignorarlos.

 

 

 

 

Pero el malestar social de los años posteriores, y el crecimiento y la creciente asequibilidad de los viajes aéreos, cambiaron todo eso, según los historiadores.

De 1968 a 1972, las aerolíneas vivieron lo que se conoció como la "época dorada del secuestro aéreo".

 

 

Los pasajeros accedieron, aceptando pasar por detectores de metales, tener su equipaje sometido a rayos X y más. “Estamos tan acostumbrados a que nos registren que es bastante increíble."

Lo que ocurrió en el Miss Macao no fue una historia singular. Fue el primero de muchos incidentes de aviación que transformarían la forma en que los humanos viajan por aire. Antes de “la edad dorada del secuestro” o los ataques del 11 de septiembre de 2001.