Como se los explico? Tiene que ver con todo lo que sobreviene a un ser humano productivo, en la edad de su mayor estabilidad emocional, su mayor conocimiento, como ser retirado de su trabajo y de toda oportunidad laboral a los 60 o 65 años, es un offside, un fuera de lugar …
Por eso a la vejez, viruelas, porque las viruelas se daban en la niñez, o en la entrada a la pubertad, “a la vejez viruelas” señala un despropósito, un “algo fuera de tiempo y lugar”.
Qué pasa cuando el ciudadano termina su ciclo laboral entre los 60 y los 70 y debe retirarse dizque “a descansar”?
La respuesta tiene incendiada a Francia, que protesta y levanta pancartas e inquieta a muchos países que ven cómo la vida se alarga, la sociedad debe alimentar un número cada vez mayor de jubilados y disminuye en cambio el porcentaje de jóvenes cuyo trabajo sostendrá a los que ya colgaron los tacos.
Un poco de Historia
Hace 2.400 años, en tiempos de Sócrates y Platón, la media de vida de los griegos era de 27. Hacia 1850 el promedio mundial registró edades de 42 años.
Gracias a la ciencia, la cifra se disparó en el XX y el XXI: 46.5 en 1950 y 72.58 en 2023.
Los disturbios en Francia, las protestas, obedecen a que el gobierno busca subir dos años la edad de jubilación: de 62 a 64.
En Alemania, Noruega, Holanda e Italia se retiran hombres y mujeres a los 67 (o unos meses menos). En el Reino Unido a los 64; en Polonia a los 65 y 60. En Latinoamérica (promedio actual) los trabajadores que hayan cumplido la cuota de años que exige la ley se jubilan a los 62 y las mujeres a los 57.
Morirán, según se calcula, a los 71,5 años los hombres y a los 78 y centavos las mujeres.
Sin embargo, en un país de vocación eminentemente laboral como Japón, ve decrecer cada año su población, cada año hay 450 000 más decesos que nacimientos … el país se va encogiendo.
Nada de camuflajes: ni veteranos de la vida, ni terceristas de edad, ni queridos abuelitos, ni otras pendejadas de la corrección política.
Que no es la declaratoria oficial de ancianidad encarnada en la pensión, sino lo que sigue: la post vejez.
Cuáles son los planes de actividades que permitirán una vida grata tras el retiro?
Basta con dejar que millones de personas mayores se marchiten tendidos en sillas o en hamacas?
Está demostrado que la inactividad es peor que la vejez y que la vejez sedentaria es la cuota inicial de la muerte.
Te cuento un cuento
Voy a contarles lo que ocurrió con Walter y con Rita al llegar a la edad de retiro. Walter es un personaje imaginario fabricado con materiales de la realidad: un mosaico de tres o cuatro amigos míos. Rita es el personaje principal, también imaginario. Tiene 94 años, vive en San Jacinto y es orgullosa bisabuela.
Walter trabajó durante años con seriedad y eficiencia. Soñaba con jubilarse y dedicarse como pasatiempo a negocios de bienes raíces. Pero ni se preparó ni lo prepararon para la post vejez. Así que en vez de aplicarse a su proyecto se abandonó en brazos del televisor y de las siestas.
Se fue “aplatanando”. Se agudizaron los males que ya tenía y aparecieron otros problemas de salud. Ganaba en kilos lo que perdía en memoria. Lloriqueaba. Se quejaba. Se volvió agrio. Jodón. No pudo disfrutar de su pensión ni cuatro años. A los tres y medio, Walter descansó en paz. Sus familiares también.
Por el contrario, Rita no ha parado un segundo de moverse, de viajar, de leer, de ir a cine, de comentar las películas, de criar mascotas, de visitar amigos, de organizar los archivos, la biblioteca y la obra de su marido. Ha superado varios duelos familiares abrazada a sus nietas, con las que discute de política y de literatura. Sigue declarándose de izquierda. Escribe una columna cultural en un blog de vanguardistas.
La post vejez de Rita es más activa que la juventud de quienes viven presos de las redes. No dudo de que pasará de los cien años.
Por qué estos asuntos no son materia de estudios, de proyectos, de despliegues oficiales y privados? La post vejez no mide el tiempo en días sino en salud. Le preocupa más la actividad posterior al retiro que la lucha para que llegue pronto. Algunas preguntas trascendentales: ¿Qué hará el que se jubila muy temprano? ¿No es mejor seguir trabajando contento que “conquistar” la abulia y el deterioro de salud? Los especialistas desaconsejan dejar el trabajo sin programar ocupaciones físicas e intelectuales para el retiro.
“La pérdida de actividades laborales e interacción social son responsables en buena medida de la decadencia del retirado” (The New York Times, IV.13.2023).
Parte de la jubilación debería consistir en preparar a la gente para ella. Así como existen el preescolar, el preuniversitario y el curso prematrimonial, que se capacite al ciudadano para afrontar psicológica y físicamente la vejez. Que mantenga el dinamismo, la curiosidad, la vitalidad, el humor; que se ocupe, que haga ejercicios; que adquiera —si no los tiene— hábitos como leer y escribir; que tome clases, realice planes familiares, se reúna con amigos, asista a conferencias y presentaciones. Que sea como la Tita, no como Roberto. En fin, que viva la vejez, no simplemente que la padezca.
Preocupémonos menos por alcanzar la vejez y más por ocuparnos durante ella.
La Asociación Federal de Abogados Defensores de USA (Association of Federal Defense Attorneys), han hecho públicas, en un post de su página oficial, las preguntas más “bobas” (dumb questions) que en efecto se hayan hecho dentro de un juicio oral en USA.
Ni tirados a los leones, ni peleando con una red ante gladiadores, las Historias tradicionales del cristianismo (y de las historias verbalmente trasladadas de generación en generación por los católicos) enumeran miles de mártires cristianos. Sin embargo, existe muy poca evidencia histórica para tales afirmaciones.
- Quien fue ? – Preguntó el papa Augusto con su habitual gesto adusto, ceño fruncido como correspondía al carácter de este italiano, elegido cabeza de la Iglesia Católica en el siglo XIV.