Éramos de los más cuadrúpedos y felices, homínidos de cuarta categoría que nos apareábamos una vez al año para efectos de procreación … nada más!
… y siempre de “perrito” porque andábamos con la manos a ras de suelo, de lo más horizontales, o sea que como nos juntábamos una vez al año con nuestra esposa vivíamos en cavernas separadas, y ni siquiera le veíamos la cara, recogíamos de la naturaleza lo que necesitábamos y ya está … no debíamos nada, que problema podía haber ? Cual Stress?
La madre de todas las neuralgias
Pero entonces, nos acordamos que éramos primates antropomorfos y nos dio por volvernos bípedos (eso fue hace 3.5 millones de años), cambió el asunto, ya de pie, a diferencia de la horizontalidad de todas las especies del reino animal, descubrimos que nos sobraban dos extremidades …
- Y amor, que hacemos con estas dos extremidades que ahora nos sobran ? – dijo el Homo Australopithecus .
- Bueno, las podés usar para cazar animales, mientras yo uso las mías para hacer lo que tu hacías antes, o sea recolectar frutos …además, al volver de nuestras labores, podemos usar estas extremidades para – dijo la Mujer Australopithecas …
- Para?
- Para ya no solo aparearnos como los animales sino que toques y acaricies esto y yo lo otro …. Y todo ese asunto
Y el asunto le gustó, además que la ingesta de carne y frutos de los árboles, que ahora alcanzaban, les aumentó la líbido y esto de hacerlo de frente, les permitió verse a los ojos, besarse y también les pareció grato, así que el “chaca chaca” ya se volvió casi diario, por lo que pasaron a vivir a la misma choza.
Habíamos pasado de la reproducción al placer, de la necesidad al gozo.
Y Ojo ! El asunto es el mejor des estresante que hay …cuando está bien hecho … bah! Inclusive mal hecho también.
Y en cambio tu … que me has dado a mí?
La convivencia traía problemas domésticos además de mayor cantidad de gente que alimentar …
- Escuchame inútil, vas a dejar ese pedazo de búfalo ( recordemos que ya habíamos pasado el Estrecho de Bering a pie) tirado ahí en la entrada de la choza? – pregunta la mujer Neolítica.
- Es un bisonte mujer …
- Lo mismo da … van a venir los Pérez de visita y ya sabés como son de garroneros, van a querer que les demos un pedazo.
- Pues no sé dónde guardarlo, acordate que todavía no inventan el freezer. – contesta el Homo Sapiens.
- Hola papá, mamá, traigo unas mojarras de las grandes que pesqué en el río – dice el hijo mayor entrando – Papá … necesito dinero para la escuela.
- Otra contribución escolar?? – se enoja el padre.
- No es para la renta, si no las pandillas no me dejan pasar.
Ya el pobre Homo y su Domina, tenían motivos suficientes para comenzar a conocer el stress … comenzaban a surgir los valores de intercambio (puntas de flecha, piedras, plata) surgía …el dinero.
Llegamos en barcos
Un par de siglos más tarde, ya distribuídos por América, vinieron los españoles y tuvimos que darnos por descubiertos, y encima, en poco rato y a fuerza de cruz (no Ted Cruz) colonizados … el stress ya era insufrible, aparte que teníamos con los españoles diálogos muy poco constructivos:
— Voy a pasear – decía el Español.
— Yo voy a tirar flechas - decían nuestros pueblos oriundos
— Voy a recorrer muchos países.
— Voy a cazar.
— Voy a adueñarme de muchos países.
— Yo voy a matar tu ganado.
— Yo voy a la guerra.
— Te voy a matar a flechazos.
— Te voy a degollar.
— Yo mejor me voy a suicidar.
Claro, ahí ya entramos a los elementos depresivos, estos gabachos, queriendo imponernos sus costumbres, lo cual no quitaba que años después estuviéramos babeando viendo sus súper clásicos Real Madrid – Barcelona en la TV, cuando ellos arrasaron con nuestras riquezas, platería, mujeres y de paso nos hicieron esclavos.
Así que nuestros ancestros, ya no aguantaron mucha paja, y le dieron en la nuca a Juan Díaz de Solís, Fernando de Magallanes, Diego de Almagro y su hijo, Francisco Tello de Sandoval y unos cuarenta más, a falta de calmantes, tal parece que volarle la cabeza a un español, aliviaba el sistema nervioso.
De la paz al Prozac
Pero hoy ya no es posible volarle la cabeza a los españoles para alivio de las neuralgias y lo que salíamos a recolectar y cazar ya está empacado al vacío en lugares llamados supermercados y para comprarlos necesitamos dinero que está empacado en lugares llamados bancos, que nos sangran a diario.
La evolución del hombre ha concluido en el resultado procaz de la evolución del hambre.
Y ni siquiera nos queda el consuelo o desahogo del “apareo” al cual hemos vuelto, cuando mucho, una vez al año … como al inicio
… y siempre mal hecho.
Que celebramos los 95 años en nuestro peor momento? naaaaa ... Ni tienen idea de lo que son los malos momentos Firpenses !!
Para los Juegos Olímpicos Sídney en el año 2000, el periódico para el que trabajo, me mandó de corresponsal deportivo, a pesar de que mi campo era la política …*
Hay alguien en este país, en este dizque agujero de … (según Trump, claro está) qué no sea haragán, perezoso, holgazán?