Antes, aquellos de los “congresillos técnicos” de FIFA, previo a cada partido, con jefes de delegación, árbitros y elección de indumentaria de cada equipo … no existían. Existía eso si … una notificación de FIFA acerca de que color debía usar cada selección en cada partido del Mundial.
Pero la FIFA, no solo comete chanchadas… también chambonadas diversas.
Michel Platini (posteriormente máxima cabeza de UEFA y casi Presidente de FIFA, hoy, tras rejas) quien fue el máximo ídolo del fútbol francés hasta la aparición de Zidane, vistió la camiseta húmeda, recién puesta a secar al sol del modesto Atlético Kimberley de Mar del Plata, Argentina, en el Mundial de 1978.
Cómo fue posible?
Hace exactamente cuarenta años, Francia y Hungría debían jugar en el estadio José María Minella de Mar del Plata, por el cierre del Grupo “A”. Como la mayoría de transmisiones televisivas aún eran en blanco y negro y ambas selecciones contaban con uniformes oscuros (azul y roja), el árbitro brasileño Arnaldo Coelho les pidió que usaran su segunda camiseta. Pero las dos eran blancas.
Era el 10 de junio y estaba programado que el partido comenzara a las 13.45, hora local. Pero hete aquí que ambas selecciones se presentaron al partido con sus segundas equipaciones, es decir, ambos con camiseta blanca. Al parecer, el error partió de la FIFA, que comunicó a ambos equipos que debían usar su uniforme alternativo. Aunque Hungría lleva camiseta roja y Francia azul, en aquella época había todavía muchos televisores en blanco y negro y se podían confundir las tonalidades de gris.
Ambas selecciones se alojaban en Buenos Aires, a 400 kms de Mar del Plata, y ahí habían dejado sus uniformes titulares. No podían volver a traerlos …
Un directivo del Kimberley, que era directivo de Liga Marplatense de Fútbol, le propuso entonces a Francia jugar con el uniforme de su equipo (franjas blancas y verdes). La casa club del Kimberley quedaba a cinco cuadras del estadio, pero el atolladero de carros estacionados de cualquier manera era tan feroz por el partido, que ambos, el francés y el marplatense se fueron corriendo a la casa club.
Recién lavados
La señora encargada de la indumentaria, recién había lavado los tales uniformes, y colgados al sol de ese día (que menos mal había salido en junio) … medio húmedos y todos, se los llevaron.
“Les Bleus” fueron blanquiverdes, jugó con un uniforme a rayas verdes y blancas con pantaloneta azul y medias rojas. De hecho, como las camisetas del club argentino iban del 2 al 16, Rocheteau y Rouyer jugaron con el 7 y el 11, mientras sus shorts tenían los números 18 y 20, respectivamente … se impusieron por 3-1.
De esta forma, la selección de Francia, figura entre los notables equipos que han vestido la casaca de este modesto club, que con seis presencias en la primera división en casi un siglo de existencia vaga ahora por la cuarta categoría.
Y no sólo eso. Una camiseta del Kimberley figura en el Museo de la FIFA en Zúrich.
Todos aquellos que se reconfortan y regocijan, en la desdicha de otros, o sea, son felices por la desgracias de los demás y no por los logros propios (de hecho no tienen ninguno), cerebros masturbaticios de cuarta categoría, van a tener que buscar ….
Ha llegado un deseo bastante propio,
es un deseo que dicta la piel ...
Dime que sí puedo
Que seré feliz