No te molestes diciendo “lo siento …”
simplemente, pasa adelante
y vuelve a convertir
mi salud mental en un desastre.
Llegas justo en el momento
cuando empezaba a ordenarme
Llegas justo en el momento
cuando empezaba a olvidarte …
Esto ya lo hemos vivido antes
llegas con la misma cara de lluvia
pidiendo perdón a las baldosas
sin mirarme a los ojos
sin mostrarme tu rostro de mujer
y se supone que yo salga corriendo
a tus brazos …
otra vez.
… tu eres la droga que jamás debí probar
… la partitura que jamás aprendí a tocar
… esa película mala que aun así, ves hasta el final
… el último trago al que no me pude negar.
… tu eres el avión que no logré conectar en Madrid
… el cadáver que tengo enterrado en mi jardín
… el libro que empecé pero no supe escribir
… la enfermedad que no conozco y de la que voy a morir.
… tu eres ese hábito que no logro dejar
… las vergüenzas que en mi vida tuve que pasar
… el accidente que siempre supe que tendría y no pude detener
… la cicatriz que oculto y no logro esconder.
… tu eres una revista barata que aun así me dedico a hojear
… tu eres ese idioma extranjero que nunca pude dominar
… tu eres mi arresto por insultar a un oficial
… tu eres todo lo que en mi vida, hice mal …
Y ahora si, levantas la mirada
con esos ojos gris tipo azul octubre
enmarcados en una preocupante palidez
quédate
descansa
come
duerme
pero mañana cuando vuelva de trabajar
ya no quiero volverte a ver
mi corazón está amurallado
no hay marcha atrás
esta vez …
Que todos estamos locos, es un hecho, pero no vaya a creer que este estado de locura es privativo del Siglo XXI … para nada …por eso me he propuesto comenzar a contar historias reales, que de tan ciertas, hasta parecen mentira ... pero sucedieron! Estas son las crónicas del disparate.
De estas soledades, inconmovibles, nefastas, tristes, desesperanzadas y agotadas, hechas trizas y aun con capacidad de esbozar una risa … en los momentos que sabemos perfectamente que nunca va a estar acompañado el desierto de nuestras vidas …
Estos son testimonios interesantes, divertidos, “levemente” retocados de alumnos de 3os y 4os grados, dando una opinión escrita acerca de sus profesores y profesoras (como se dice en el nuevo dialecto Bolivariano, idioma oficial que se habla en las esferas gubernamentales del país).