
Me pasa algo curioso contigo,
un algo que cada vez me atrapa más a ti,
me provoca, y hasta me despierta en otro cielo,
me llenas tanto de ti, que es imposible nollegar a sentirte mío,
cuando me haces tocar un cielo perfecto.
No hay límites en tu entrega, no los conoces, y yo he perdido
el temor a ellos entre tus brazos, y tus caricias traviesas,
esa locura que cada vez siento tan propia,
que despierta la mía, y me lleva a perderme en ti.
Aprendo contigo a dejar que nuestros cuerpos se amarren, se unan,
que no dejen pensar a la razón, porque ya es imposible que no se sientan,
esos deseos intensos de ser una y otra vez tuya en la entrega de siempre,
y es que sin coordinar tanto, resulta que eres tú a quien necesito sentir.

El hombre que hace magia con mi placer, el hombre del que tengo grabado
su sabor más allá de mi piel, porque vivo su esencia, no solo su presencia.
Mi Sol, perfecto que me quema con caricias, que inundan de fuego mi interior,
con cada beso a veces perverso, que adoro tanto como el tierno, dulce y tímido
que me despega de la tierra y me lleva a un propio cielo.

Me pasa algo curioso contigo, y es que
vas enseñándole a mi cuerpo, cada vez más a estar sediento de ti,
me vas cautivando siempre en esa magia extrema, de la que no quiero escapar,
asimismo, abres el camino que te pertenece, que siempre fue tuyo.
Me llenas tanto de ti, que seria un pecado no decirte
cuanto me gusta sentirme atrapada en ti, porque
Me pasa algo curioso contigo desde siempre.

Es en particular, grande la euforia que tenemos en nuestro país y aledaños, por el Mundial Brasil 2014, lo cual me alegra, porque siempre es mejor escribir de esta chimbomba divina, y su historia, que hablar de la falta de cerebro de nuestros diputados, empezando por su Presidente, que aparte de todo, nos regala a los padres este “Asueto Nacional”, pasemos al tema que envuelve ambas puntas de la fecha.

No debe de haber mayor tristeza que la de ser prisionero de tus propios temores, más aún que de tus propios captores …
No debe de haber mayor tristeza que la de no poder confiar en nadie, y mucho menos en los que están al servicio de prestarte una seguridad … confiable.
Era un El Salvador, provincial, rústico, tan solo emergiendo de la barbarie a la civilización, bajo la tutela de la Corona Española, parte de una Capitanía General de Guatemala, chapines que nos llevaban un “hambre terrible” y estaban convencidos de que todos los territorios de la Capitanía les correspondían. Falso.