logo

 

Si me dices que escriba lo que quiero…

Quiero seducirte con el beso del deseo,

Quiero que me estremezcas con tus ganas,

 

Quiero vencer tu piel con mis manos,

Quiero que te arrebates en el deseo, te pierdas

Y me pierdas, sin razonamiento, deja que los deseos

Se impongan, nos dominen, nos atrapen

 

Quiero hacerte volar en el sin fin de los placeres

Acariciarte lentamente, hasta perderte en mí

Quiero hacerte volar, estando atada en tu piel,

Quiero que me hagas el amor, sin temor

Quiero que me muerdas y me invadas

 

Quiero acariciarte, envolverte en besos intensos,

Llevarte a cielos precisos, donde un mundo nos une…

Nos embriaga de humedad, nos penetra en el ritual

De la entrega sin medida…

 

Entra a mi profundidad, descubre la pasión

Que habita y reclama desde siempre tu nombre…

Tu presencia…tu esencia, déjame en mi piel

Este placer de amarte, de vivirte, sobrevivirte

Pero sobre todo satisfacerte, hasta donde yo sé…

que puedo llevarte

Otros Posts

Brasil 2014. El Mundial de los (no tan) descalzos

1950

Pocos tienen en cuenta, dentro de muchas analogías entre 1950 y 2014, que una de las razones por las cuales Brasil perdió el último partido del Mundial 1950, y no quedó campeón en “su” mundial, fue el excesivo triunfalismo, antes del último partido, la consigna era “Ya Ganamos”, por qué ? 

Cuando te ganan las ganas de tener ganas

erotic waves stefan kuhn

Llegar a tener relaciones sexuales es difícil, siempre. Cuando uno se casa, o tiene novia formal, o logra pareja estable piensa: "Por fin voy a tener sexo cuando yo quiera!". Mentira! Eso de las relaciones sexuales estables es una leyenda.

Como un país pierde su campeón y base de su selección de fútbol, en un solo accidente de aviación

superga air disaster

Una noche de lluvia, el reloj marcaba la transición del 3 al 4 de mayo de 1949, en esa noche fatídica Italia perdió a su máximo campeón de futbol hasta esa fecha, el Torino FC, y la base de su selección nacional, todo eso en un solo avión, en una sola tragedia, la tragedia de Superga.

© Daniel Rucks 2025