Desde una cabina telefónica
de una playa perdida
que queda por Nosedonde
cercana a Conozcoperonomeacuerdobien
… me llamas, al amanecer, Mariel.
Y me dices que estás harta, cansada
de todos ellos
Y en particular de él
El, es el él detrás del cual
te marchaste de mi lado esta vez
dejándome en custodia el perro
y el corazón estrujado como papel.
Pero nena, tengo fotos
acerca de cómo va a ser
tengo retratos de nuestro porvenir
impresos en papel
y aunque pueda parecer extraño
en todos aparecemos juntos tú y yo
tengo postales del futuro
de los dos.
Y me preguntas por el perro
te cuento, que está tranquilo ,
no ha dejado de comer
en base a todas tus ausencias
creo que hemos llegado a conocernos bien.
Y entonces, bajando el tono de voz
me dices lo lindo que sería
que estuviéramos juntos en esa playa
buscando caracoles,
murmurando canciones ….
Me juras por Dios que esta vez
ya no te vas a marchar
y preguntas
- Me puedes venir a traer ? …
Resulta que tengo fotos
acerca de cómo va a ser
tengo retratos de nuestro porvenir
impresos en papel
y aunque pueda parecer extraño
en todos aparecemos juntos tú y yo
tengo postales del futuro
de los dos.
Y aunque yo me había prometido
que esta vez era la última
aquí vamos con el perro
manejando a tu encuentro Mariel
como demonios te las ingenias
para llamar
justo en el momento
en el que te empezaba a olvidar ?
Todas las palabras que nunca dijimos …
Todos los “te quiero” que no nos animamos a pronunciar …
Todos los grandes proyectos que nunca iniciamos
Mis queridas y muy emperifolladas señoras, mis queridas amigas que asisten a cuanta recepción les sea posible, más por ser vistas que por el deseo de asistir a estas reuniones.
Romeo y Julieta sí existieron, pero no eran italianos, sino que vivieron en la India y se llamaban Malava y Malati.