Somos los reyes del últimahorismo
patrones de la improvisación
Jerarcas absolutos de “a lo que salga”
“ahí déjalo”, “se soluciona solo”, “lo arreglamos con tirro”
no solo en actividades cotidianas
sino en las más altas esferas gubernamentales
es más, sobre todo ahí …
es donde se da la más nefasta y holgazana improvisación.
Las leyes de la República se sancionan en un solo sentón
en madrugones
O en la última sesión de la gloriosa
“Asambeba Legislativa”
con los padres de la patria (prefiero ser huérfano)
hasta atrás
fondeados en sus curules
babeando sobre los borradores de la Sagrada Ley
los estertores de los whiskys cinta negra y vodkas Oval (más caro e importado)
que nosotros pagamos con nuestros impuestos
y ellos se autoregalan en bonos …
Mientras los cuatro que quedan despiertos
terminan arreglando el tamal a las cuatro de la madrugada.
La eficiencia es hija de la planificación
la mediocridad es hija de la improvisación
los fracasos siempre son huérfanos …
La transparencia nunca ha sido tan oscura
ni tan nula.
Eso si los viajecitos ya se los están repartiendo
como si fueran churritos Diana de una bolsa.
Esta es la tierra de “la culpa siempre la tiene el otro”
nadie es responsable de nada.
Ojos que no ven patean caca
y estamos en los umbrales de quedar hundidos hasta el cuello
en la mismísima mierd ...
Escribir, por ejemplo, que mi cuerpo arde en el recuerdo de tu boca descubriendo rincones oscuros de mi piel. Excitarme con el susurro tórrido de tu voz a mi oído. Sentir el espasmo con el choque de tu pelvis desnuda en los poros húmedos de mi piel.
Goofy es un personaje cómico de dibujos animados de animales creado por Walt Disney Productions en 1932. Surgiò de espectador en un teatro, le gusta usar un cuello de tortuga y un chaleco con pantalones, zapatos, un sombrero alto y guantes blancos.
No sé si es pila mía, o si le pasa a algunos más, pero el entusiasmo del viaje, de salir de la Patria, de ir a conocer el mundo, me alegra un rato … y después me llega el bajón …