Como querés que te quiera si no tenés derecho siquiera a caminar seguro por la acera?

Si por la acera transitan nuestras penas, apenas y a duras penas … nuestros derechos

derechos que ya dejaron de ser izquierdos y humanos para convertirse en cualquier cosa, vidas que se roban por ser familiar de Miguel o buen amigo de Juan, vidas que se refunden en el anonimato de los casos que nunca se investigarán … y así ha sido durante 25 años

25 años en los que nos hemos especializado en despotricar contra el adversario sin un solo amago de propuesta, de idea, de algo que nos haga pensar a que existe para nuestros hijos un futuro diferente a esto de estar peleándose por las pensiones …

Pensiones de habitaciones llenas de humedad y ratas a ratos, calor y moscas, carentes de padres y madres, donde hijos para dfenderse de quien sabe quien se aglutinan en pandillas, e hijas se prostituyen por centavos porque los necesitan …

Los necesitan dando seguridad, en cada calle, barrio, esquina, pero ellos carecen de seguridad y los asesinan, uniforme delator, carne de cañón, decoradores de calles con cintas amarillas …

Una cinta amarilla había puesta su madre a Marisol rumbo a la escuela en su cabello, la mataron en el camino, gatillo fácil, prueba de admisión a las maras, 9 años apenas, su madre deshace la cinta amarilla que hace minutos arreglada “Mi hija …era tan linda, por que me la mataron?” Pregunta mientras acaricia su pelo …

Ni un pelo de tonto tienen los políticos, diputados, “quien no transa no avanza” de nuestro país, ignotos ignorantes de colores diferentes que igual al camaleón, cambian de color de camiseta según la ocasión, escoria viva … culpables de nuestra ruina

ruina que se resume en cuatro precipicios, seguridad, economía, educación y salud, nadie hace nada para mejorarlos porque nada pueden hacer – cerebralmente hablando – los encargados de las mejoras, por eso tenemos treguas exitosas en descenso de número de muertos pero que nunca existieron, porque nadie es culpable, y si no hay culpables … quien vela por los muertos?

Los muertos los pone el pueblo, los pasajes aéreos en primera clase el Gobierno, los puestos para activistas se pagan con nuestros impuestos, las alegrías las pone la Selecta Playera, los incendios los pone Hacienda … quien ayuda hoy a la madre de Daniel?

Daniel colapsó desde el último piso en llamas de un edificio público sin obra arquitectónica ni herramienta de seguridad alguna de protección para incendios …  igual que todo el resto de nuestros edificios públicos …

Públicos son nuestros defectos, privadas nuestras virtudes, lo que hacemos mal salta en redes, lo que hacemos bien queda en el anonimato, la verdad ya no la tienen los periódicos ni los noticieros, sino el ciberespacio, sus caracteres, el grado de drogadicción o alcoholismo de los trolles de ocasión …

ocasión en la cual dos microbuses se vienen peleando derecho de vía y pasajeros y se sube uno de prepotente a la acera y atropella a un compatriota de 65 años y le quita la vida a quien simplemente caminaba por la acera …

 

Como querés que te quiera si no tenés derecho siquiera a caminar seguro por la acera?

Y los salvadoreños, nos vamos enconchando, encerrando, buscando el refugio seguro que sea, donde sea, aunque eso implique aislarse de los demás, evitar contacto, no meterse, no denunciar, no testificar, quedarse callado, hasta reventar si es posible, no importa que queden libres los culpables, no importa a quien maten en la acera ….

… si la acera no es la nuestra

… y nos aislamos cada vez más

… como si tuviéramos corazón de poliuretano.