Se nos casa el “Novedades”, el amigo de todos, un hermano de sangre más… y un perfil menos en Tinder, la banda de los “Espanta Evas” pierde a su último miembro invicto.
Le llamábamos el “Novedades” por aquello de que tenía novias de 68 años y de 21, de 19 años y de 48, todo el espectro de edades, por eso el “Novedades” tenía ese nombre científico, nunca vio la edad de sus potenciales novias … como impedimento.
Eso si, se mantuvo soltero, de acuerdo al juramento de los “Espanta Evas” que hicimos en años de bachillerato: “Nunca, ninguno de nosotros se va a casar, moriremos solteros …”
Farsantes! Del grupo de 11 “Espanta Evas” que éramos, todos menos el Novedades, ya nos habíamos casado, otros casado y divorciados y vueltos a casar, todos teníamos un rimero de niños colgándonos del cuello y una señora brava, detrás de nosotros, gritándonos, dándonos órdenes … regañándonos.
Pero llegó el día que el Novedades, nos dio la noticia en una reunión de Comité Ejecutivo:
- Señores, colegas, me caso!
- Nooooo, no puede ser … - fue el murmullo general.
- Si – nos dijo el Novedades – estoy enamorado.
Y se había enamorado de Yoko Ono, literalmente, una japonesa como de 50 años, de mal carácter, no muy agraciada, hasta con asomo de bigote, no hablaba ni una palabra en español, y el Novedades nada de japonés … sepa Judas como se entendían.
Nos sentimos como Mc Cartney, Harrison y Ringo Starr, cuando Lennon les presentó su prometida …
Pero no podíamos dejar que se nos casara el último miembro dilecto … así que elaboramos un plan.Organizamos una despedida de soltero, la noche antes de la boda, con todo y pareja (para que asisitiera el Novedades con su Yoko Ono … nunca nos aprendimos el nombre).
Nos juntamos en la fiesta, todos los amigos de antes y de siempre, abrazos amigos interminables, brindis coloridos de manos conocidas, sonrisas capturadas, todo fluía de la mejor manera hasta que llegó la hora de que empezaran a bailar y nosotros echáramos a andar el plan.
Una comunidad de estados civiles: los casados con hijos, los amarrados sin hijos, los solteros que quieren ser casados, los casados que quieren revivir pinceladas de soltería y, por supuesto, los infaltables «espanta Evas», nuestro grupo que se resistía a perder su último miembro.
Nunca fuimos tan buenos muchachos, éramos unos “bastardos sin gloria”, (gracias Tarantino por ese título memorable), éramos una secta.
Prosigo con la historia del «Novedades », este, ahora convertido en solista por una Yoko Ono que despierta su calor, migra del grupo. Pasados unos minutos, el encuentro se torna más denso y provocativo, un fuego se va agigantando.
Mientras todos bailaban, nos llevamos a Yoko Ono al bar, ella, sonriente, no entendía nada, pero estaba relativamente feliz de que los amigos de su futuro esposo tuvieran un gesto amable con ella.
Teodoro, hoy Médico Homeópata destacado, parte de los “espanta Evas” desde siempre, preparó un menjurgue de hierbas que producían sueño, dormidera, valeriana, unas Dormicum bien molidas, se lo mezclamos con una piña colada bien cargada, y en pocos minutos …zas! Yoko cayó dormida.
La subimos a la camioneta del “Cacha”, polarizada y agarramos, en medio de la noche, camino a Metapán, doblamos en San Fernando, cruzamos a Guatemala por un punto ciego que conocíamos, y llegamos a Asunción Mita, ahí en un parque, la acostamos, profundamente dormida en una plaza, la cubrimos como una manta (no somos tan crueles tampoco) le dejamos unos dólares y su pasaporte en la cartera … pero iba a dormir al menos dos días, y no iba a tener como volver para la boda, si no hablaba español … imposible! Los “Espanta Evas” actuaban otra vez y salvaban a uno de sus héroes.
Al día siguiente, estábamos todos listos en la Iglesia, junto al “Novedades” conscientes que no habría boda, pero sin delatarnos …le dijimos al “Novedades” que fuera a esperar a su novia al altar, y nos sentamos en una de las bancas, inventándonos excusas para consolar después al “Novedades”, porque bue … el muchacho estaba enamorado de la Yoko.
La boda era a las 5 00 pm, y a las 5 00 en punto, empieza a sonar la Marcha Nupcial, vollteamos a ver al “Novedades” y una sonrisa de 180 grados, le coronó la cara … miramos todos en simultáneo a la entrada de la Iglesia …. Y ahí estaba la Yoko Ono! Vestida de novia, pulcra, radiante …como que nada hubiera pasado!
La «Eva» pone su mejor cara de disimulo, sonríe, pero el fastidio le llega hasta sus zapatos cuando pasa a la par nuestra y nos mira con una cara de “a ustedes les voy a obligar a hacerse el Hara Kiri a todos!!” … nos dio miedo, como llegó hasta ahí?
Con razón los japoneses son líderes en pensamiento minimalista, racional, tecnológico, y nosotros no llegamos ni a la Liga de Ascenso en esa rama …
Se nos casó el “Novedades”, el último invicto se perdió en manos del Imperio del Sol Naciente, ninguno de los “espanta Evas” fue a la fiesta, teníamos un pavor terrible, la Yoko nos podía castrar con un solo golpe de su espada Katana …. No, a casa tempranito ….
… nos juntamos en un bar al día siguiente
… la conclusión es que ahora entendemos Pearl Harbor.
O yo soy el más ingenuo de los ingenuos, o mi esposa es más muchísimo más viva que yo, o el mundo me abrió los ojos leyendo una noticia en el periódico en el 2004.
Fue un 4 de diciembre, años ha … y muchos, 1872, uno de los misterios más grandes de la historia, que hoy, ciento cuarenta y dos años después sigue sin resolverse (aunque la verdad, poca gente se acuerda).