Internet no tenía Santo Patrono, ojo ... la Iglesia no es que estuviera muy convencida de que un medio donde hay 38.6 portales de pornografía por cada enciclopedia digital, fuera muy santo que digamos
Habían varios candidatos, pero al final, se descartaron a unos por muy veteranos (San Isidoro de Sevilla, del siglo VI) y se terminó eligiendo a San Giacomo, nacido en 1884, que publicó revistas católicas, muchísimas biblias y las repartía por doquier y murió en su tinta a los 87 años, después de recibir la visita del Papa Pablo VI … un verdadero comunicador, ágil y dinámico.
Letanía pocus serium
Ahora bien, ya que tenemos Patrono de la web, es lógico, que aquellos que somos creyentes y los que no, tengamos una pequeña letanía para iniciar nuestras sesiones en la World Wide Web… sin el más mínimo afán de ofender.
Oh San Giacomo de Alberione, que estás en lo alto del Ciberespacio
(Conéctanos)
Tan italiano como el fetuccini al pomodoro, como Mónica Bellucci
(Bellísima!!)
De las caídas de la red ..
(Protégenos!!)
De los proveedores de servicio que te ofrecen 3 Gigas y nos llegan ni a 226 kb (Escóndenos …)
De los servidores inestables, y “disculpe pero se nos ha caído el sistema”
(Sálvanos)
De los antivirus gratis que vienen con la máquina, te la hacen lenta y después si no les comprás la suscripción completa te extorsionan nefastamente …
(Cuídanos …)
A los ociosos que aún siguen mandando cadenas con todas las direcciones expuestas (Aniquílalos !)
A los que mandan poemas con fondos violeta lila rosáceo …
(Desconéctalos !)
A los que se suscriben a programas chafas de Twitter, que después mandan información de estadísticas y tonterías de su cuenta
(Búscales oficio …)
A los clones que se hacen pasar por nosotros
(Descúbrelos !)
A los troles contratados por los partidos políticos y mandan 11 veces el mismo mensaje, de la misma IP, con 11 nombres y perfiles diferentes
(Desásnalos !)
A los hackers que se roban toda la información
(Enchúchalos !)
Nuestros passwords
(Recuérdanos …)
Nuestros mensajitos románticos clandestinos
(Adviértenos !)
Nuestras memorias ram
(Auméntalas ..)
Nuestros amigos que postean chistes idiotas
(Bórralos ..)
Nuestras amigas que escriben con emoticons
(Madúralas …)
Nuestra lengua castellana destrozada por caracteres
(Sálvala !!!!!)
De los programas gratuitos que te instalan malware en el equipo
(Blíndanos …)
De los anuncios “porno pop up” que te pueden saltar en una conferencia ante 100 personas
(Libéranos !)
Oh San Giacomo, líbranos de nuestros parientes y principalmente nuestros hijos que nos usan el móvil, la PC, el periférico, con la intención sana de matar el tiempo y meterse a los juegos en línea, y terminan desorganizando todo el desktop, la información y dejan las teclas llenas de pegoste de crema de Galletas Oreo …
Te pedimos San Giacomo Della Web, tu que estás sentado a la derecha del que todo lo sabe, o sea el buscador de Google, que la red descienda en costos, crezca en velocidad y la banda ancha se ensanche de posibilidades ….de conocimiento sobre todo San Giacomo, que tanto le hace falta a toda la humanidad …
En nombre del Tablet, Linux, I Pod Nano … E Bay !
Hay una gran cantidad de cuentos que se han difundido en la cultura popular, que fueron producidos por los hermanos Grimm, Jacob Ludwig Grimm y Wilhelm Carl Grimm fueron académicos alemanes del estado de Hesse o Hessen a fines del siglo XVIII y principios y mediados del XIX, famosos por recopilar cuentos e historias del folclore antiguo de toda Alemania y áreas adyacentes.
Estaba totalmente deprimido por los últimos acontecimientos que la pasaron: una relación amorosa fallida, económicamente estaba muy mal porque fue despedido del trabajo el cual sucumbió a la depresión económica que llego al país,
Aquel instante, del 16 de julio de 1950, cuando Alcides Ghiggia toma la pelota , con el marcador Brasil 1 Uruguay 1, y la clava en el ángulo derecho para subir el marcador a 2 para los celestes y pocos minutos después, consagrar a Uruguay campeón del mundo por segunda vez, varias muertes se desencadenaron ..
11 personas se suicidaron en todo Brasil, incluso una en el mismo Maracaná, solo un hombre, viviría dos muertes, después de ese suceso.