Apreciado Santo Padre:
A estas alturas, Su Santidad ya ha debido planificar bien, aunque no nos lo haya hecho saber todavía, su viaje a estas nuestras cuscatlecas tierras, para la gran celebración de la Canonización de nuestro Obispo Mártir Monseñor Romero, nos llena de orgullo esa visita y además, no podemos negarlo, un dejo de preocupación …
Porque a menos que usted, hincha fanático del “Cuervo” y no del tequila, Santo Padre, sino de los “Santos de Boedo” haya venido para la gira centroamericana de San Lorenzo de Almagro de 1984, donde barrieron con cuanto equipo chapín, catracho, salvadoreño y tico se les puso enfrente, algunas cositas de nuestra tierra … le pueden sorprender.
Ya lo estamos esperando, sin fecha aún, para esta fiesta de canonización de San Romero de América, pero consideramos prudente adelantarnos a algunos “detallecitos” en el tiempo …
Total, el tiempo ganado, no es tiempo perdido …
…y el tiempo perdido hasta los santos lo lloran.
Yo era un perrito de color negro con parches blancos en todo mi cuerpo, fui secuestrado o quitado por unos niños de una camada de 6 perritos que habíamos nacido en plena calle. Me acobijaron en una casa donde era la atención de los niños y los padres, recuerdo que fue una discusión cuando quisieron ponerme un nombre, salieron a relucir nombres de emperadores romanos, reyes, artistas, políticos, al final me pusieron un nombre desconocido y creo que hasta inventado, desde entonces soy conocido como “Blandin”, todos me llamaban por ese nombre: “Blandin”.
Duele, como pocas cosas duelen en la existencia … podemos reventarnos el cráneo buscando culpables y vamos a encontrar quinientos … pero diluir las culpas entre quinientos, una vez más, deja ningún culpable y múltiples incertidumbres.
Antes que me salten con el típico comentario, “Ah si! Yo conozco la Historia, yo vi “Código Enigma (Imitation Game)” en Netflix!! Se la recomiendo!
Pues déjeme contarle amablemente que no, que usted no conoce la Historia, conoce la versión Hollywood de un hecho real, modificado a su antojo, para hacer que más gente vaya al cine o se prenda al streaming … la Historia está en los libros.