El Radio (Radium (Ra) en tabla periódica), fue descubierto en 1898, por los pioneros de Física y Química, el matrimonio de Pierre y Marie Curie …
Lo interesante, es que en el momento en que es descubierto, nadie sabía realmente, para que servía el radio, eran inicios del siglo XX, y lo único del radio que se conocía … era que brillaba, era autoluminoscente.
Nace el Radium
Varias compañías se dedicaron a comercializarlo, bajo distintos conceptos, por ejemplo surgió la compañía estadounidense U.S. Radium Corp, que comercializó con notable éxito en Colorado y Utah una pintura fosforescente, creada en base al radio, llamada “Undark” (algo así como “Desoscuridad”), junto a la compañía Radium Dial Co., se dedicaron a pintar relojes, agujas y números de relojes, de tal forma que la gente pudiera ver la hora en la oscuridad …
Pero vino la Primera Guerra Mundial, y entonces el hecho que los relojes brillaran mucho, no era bueno, porque podía revelar ubicaciones en medio de las trincheras, o cuarteles en la oscuridad, así que el Gobierno de USA, que proveía relojes a los Aliados, manda la indicación a estas compañías, que habiendo tanta mano de obra femenina libre, las mujeres, que tenían mejor motricidad fina, pudieran pintar solo algunos detalles de las agujas del reloj, lo suficientemente extensas para ser vistas por los usuarios, pero no por las fuerzas enemigas.
The Radium Girls
Entonces surgieron “Las chicas del Radio”, a finales de la década de 1910, el trabajo se pagaba muy bien, tres veces el sueldo mínimo, y además les daba el orgullo a estas chicas (algunas eran niñas de 11 años) de estar ayudando a los hombres en guerra.
Usaban la pintura con radium, bajo la idea que era completamente seguro, tanto así que en algunos Estados, el radio era usado como un complemento medicinal inclusive. La mecánica era sumergir el pincel en la pintura, afinar la punta con los labios (donde tragaban una pequeña cantidad de radium) y pintar.
Las chicas se empezaron a dar cuenta, que sus ropas, partes de su cuerpo, terminaban brillando en la oscuridad, por su exposición al radio.
Un hecho bastante alarmante, era que los hombres que tranajaban en las mismas empresas, trabajaban con caretas y guantes para protegerse del radio, pero a las mujeres no se les daba elemento de protección alguna.
Un día, uno de los científicos de “Undark” el Dr. Sabin A. Von Sochocky, visitó esta área, totalmente cubierto de elementos de protección y al ver a las chicas desprotegidas, les dijo:
- Cúbranse, protéjanse – este elemento es peligroso.
Las “Chicas brillantes” se quejaron ante su gerente, quien les dijo que lo que les había dicho el científico era mentira.
Empiezan los problemas
El radium o radio, debemos decirlo, es el que se emplea actualmente los radioisótopos como cobalto-60 y caesium-137, que producen radioactividad.
Pocos años después, las “Chicas brillantes” comenzaron a sufrir problemas de anemia, fatiga, sus estructura ósea se debilitaba por la exposición al radio.
Amelia “Mollie” Maggia empezó a sufrir de dolor intenso en los dientes, luego éstos empezaron a caerse, los dolores eran intensos, le diagnosticaron reuma y le recetaron aspirinas, fue la primera en morir … tenía 24 años.
En realidad, las compañías que trabajaban con radio en sus aplicaciones, sabían que era peligroso, pero pagaron profesionales para que dijeron lo contrario.
En I1924, U.S. Radium contrató al Dr. Cecil Drinker, un fisiólogo graduado en Harvard, para que investigara la planta de Orange, New Jersey, el Doctor descubrió, que la contaminación estaba totalmente extendida y que se terminara su uso para pintar lo que fuera.
Pero la U.S Radium no hizo caso, cada vez tenían más clientes para diferentes aplicaciones y las “Chicas del Radio” comenzaron a desmejorar su salud y morir, una por una.
A la carga!!
Un periódico publicó las investigaciones del doctor Drinker, quien las facilitó ya que no hubo respuesta, y esto derivó en una demanda a la U.S Radium, en 1928, pero por medio de vueltas legales, lograron posponer el juicio tres años más y siguieron trabajando de la misma manera.
El dinero que ganaban las “Chicas brillantes” solo les sirvió para pagar sus funerales, recién se suspendió su uso, por la vía legal, a instancia de las últimas supervivientes, en el año de 1938 …
… para esa fecha, se calcula que 116 mujeres y niñas que trabajaron con exposición al radio, ya habían muerto …
Dicen los pobladores de todas las zonas donde U.S Radium tuvo plantas, Chicago, Colorado, New Jersey …
… que sus cuerpos aún brillan en la oscuridad.
Resulta que hace unos días, recibí una solicitud de entrevista del CONDON, no decía nada más, no desglosaba las siglas, pero me decía que eran una serie de preguntas con respecto a la época que vivimos.
Tuve el chance de conocer Pénjamo, después de haberme empilado con el nombre de la locación por la canción, rancherota hermosamente descriptiva de José Alfredo Jiménez,
que lo pintaba como un pequeño paraíso rural…
Nuestro pasado, a veces está tan cerca, tan al alcance de la mano, que parece mentira que nos rompamos el cráneo tratando de inventar la máquina del tiempo para retroceder en la Historia.