Se ha comenzado a hablar últimamente del Príncipe John (uno de los misterios más grandes pero menos “sonados” de la Corona Británica) , ya que nuevas pruebas de su existencia se han comenzado a conocer …

Quien era el Príncipe John?

John Charles Francis de Gales nació en 1905 y era hijo del Rey Jorge V de Gran Bretaña y de la Reina Mary, o sea hermano de los Reyes Eduardo VIII y Jorge VI, tío de la actual Reina Isabel II.

Pero, por alguna razón que se desconoce hasta la fecha, poco se sabe del quinto hijo de rey Jorge V, y todo vuelve a saltar, otra vez, porque en un remate o subasta de una casa de antigüedades londinenses, apareció esta fotografía, que fue puesta a la venta teniendo como precio base  3500 euros.

Veamos, de izquierda a derecha príncipe Henry, príncipe Edward (Eduardo VIII), príncipe Albert (Jorge VI), Princesa Mary, príncipe Jorge, y sentado en la rodilla de Eduardo VIII el príncipe John (Source: InternationalAutograph/BNPS).

La fotografía apareció en 1990, y como podemos ver, están todos los hermanos vestidos ya de jóvenes (toga viril/traje de levita) y de marineros los infantes.

El Príncipe John no tuvo una infancia fácil, de hecho padeció de epilepsia (enfermedad muy arraigada entre matrimonios reales, que unen en varios puntos los mismos hilos familiares) y muy probablemente haya padecido de autismo, aunque, a decir verdad, el autismo como tal no era aún reconocido como enfermedad en esos inicios del siglo XX.

El comportamiento de los Windsor

Lo extraño de todo esto, es el comportamiento de la familia, tal parece que en la medida que crecía, los ataques de epilepsia aumentaban tanto en magnitud como en frecuencia, llegando a verdaderos escenarios de caos que afectaba mucho a sus hermanos y hermanas.

Así que el Rey Jorge V y su esposa María, decidieron aislarlo de sus hermanos, a los 11 años, para no afectar a los demás. A los 11 años! Cuando un niño más necesita la interacción con otros niños de su edad.

La familia real británica, en ese momento mantenía excelente trato con el duque de Albany, tió del Príncipe John, quien también sufría de epilepsia, pero se había recuperado al entrar a la pubertad y de ahí en adelante llevaba una vida adulta normal.

En otras palabras, la familia real británica también esperaba que el príncipe John, que había manifestado sus primeros signos a los 4 años de edad, se recuperara, pero para no correr el riesgo de que sus hermanos se encariñaran demasiado o le dieran una mala imagen a la familia real en caso de que muriera, lo aislaron.

El Príncipe John, en ese momento, quinto en la línea de sucesión a la Corona de Inglaterra, fue enviado a Wood Farm en Sandringham Estate donde fue criado por una “nodriza” Charlotte Bill, a quien John llamaba “Lalla” en su media lengua.

Lamentablemente, dos años después el Príncipe John murió, a los 13 años, de un ataque más grande que los anteriores del cual ya no se recuperó.

La Casa Real

Increíblemente, su muerte, no provocó publicación o discurso alguno de parte del Rey y la Reina, ni de sus hermanos. En pocas palabras, a partir de 1916, los habitantes del Reino ya no supieron nada y simplemente dejaron de tener en mente al Príncipe John.

En los 90s apareció la foto, y más triste aún … en el año 2015, apareció una especie de diario personal del Rey Eduardo VIII, hermano de John, que al momento de ser separado de su hermano escribió ….

“Su muerte es el mayor alivio imaginable o por lo que siempre hemos orado en silencio. Este pobre muchacho se había convertido más en un animal que en cualquier otra cosa y era solo un hermano en la carne y nada más ”.