En los últimos días, con el estallido del conflicto entre ambas naciones, han pululado cien teorías diferentes del porqué de la guerra, desde las absurdas “Ucrania siempre fue de Rusia” (la fundan galos y griegos) hasta las más atinadas “pasa por el pisto de los gasoductos” …

 

 

Históricamente …

 

En el año 200 de Nuestra Era, un período de grandes migraciones dio inicio con el descenso de los godos de la región del Báltico a la actual Ucrania.

 

Desplazaron a los sármatas, pero su propio poder fue derrotado alrededor del año 375 por los invasores hunos del este, a quienes siguieron en los siglos V y VI los búlgaros y los ávaros.

 

 

Entre los siglos VII y IX, la estepa ucraniana formó parte del imperio mercantil Turco jázaro, que se centró en la parte baja del río Volga.

 

 

El control jázaro de la estepa fue desplazado a finales del siglo IX por los magiares (húngarosque les siguieron, dominaron gran parte del sur de Ucrania en los siglos X y XI y, a su vez, fueron sucedidos por los polovtsianos (cumanos).

 

 

A lo largo de este período de invasiones nómadas, solo unos pocos de los asentamientos griegos en la península de Crimea, mantuvieron una existencia precaria, confiando en el apoyo del Imperio bizantino.

 

Tras la Primera Guerra, se desmiembra el Imperio Otomano (conquistador de Bizancio), y Ucrania es al fin, independiente por pocos años, sostiene la guerra con la URSS de 1917 a 1921 hasta que en 1922 fue Estado Fundador de la URSS.

 

 

 

 

La guerra de Stalin por la propiedad de la tierra afectó principalmente a los campesinos de habla ucraniana y su colectivización forzosa de la agricultura condujo a una hambruna que mató a entre 7 y 10 millones de personas en 1930.

 

 

Durante la Segunda Guerra Mundial, Ucrania fue invadida por las fuerzas nazis y sometida a un terrible genocidio. Se cree que alrededor de 8 millones de ucranianos perdieron la vida durante la guerra, con alrededor de 1 a 2 millones de judíos ucranianos ejecutados por escuadrones de la muerte nazis.

 

 

 

Después de la guerra, Ucrania tuvo una especie de estatus mejorado en la Unión Soviética, siendo miembro fundador de las Naciones Unidas con una forma nominal de independencia dentro de la unión.

 

 

Leonid Brezhnev, un ucraniano, se desempeñó como presidente de la Unión Soviética de 1964 a 1982.

 

 

 

Pero la realidad no guardaba relación con la constitución: Ucrania estaba gobernada directamente por el partido comunista de Moscú. Ucrania se convirtió en un centro para la industria armamentista soviética y un lugar para gran parte del arsenal nuclear.

 

 

El desastre de Chernobyl de 1986 generó indignación pública entre los ucranianos por el manejo secreto, engañoso e inhumano del incidente por parte de los sovièticos.

 

 

Sin embargo, siempre hubo un fuerte movimiento disidente y Ucrania desempeñó un papel clave en impulsar la implementación de los derechos humanos y la libertad como se describe en los Acuerdos de Helsinki de 1976, que posteriormente contribuyeron al colapso final de la Unión Soviética.

Los manifestantes se sintieron envalentonados por las propias reformas de Gorbachov. La perestroika ("reconstrucción", su intento de reformar el Partido Comunista Soviético) y la glasnost (las reformas políticas de "apertura" relacionadas) tenían por objeto revigorizar el país después de años de estancamiento, pero sirvieron principalmente para acelerar el colapso y la ruptura del Estado.

 

 

 

En agosto de 1991, los líderes rusos de la KGB y las fuerzas armadas que se oponían a la perestroika lanzaron un intento de golpe contra Gorbachov, con Gorbachov prisionero en Crimea. Con la política rusa en tal confusión, no había nada que impidiera la independencia de Ucrania en 1991.

 

 

Porque estalla el conflicto ?

 

 

Los orígenes del conflicto actual se encuentran en la aspiración de larga data de Rusia de controlar sus Estados Periféricos, concepto totalmente obsoleto en política internacional, que fue encarnada por Vladimir Putin después de su ascenso al poder en 2000. Parte de su ambición era mantener a Ucrania unida a Rusia económica y políticamente.

 

 

Fue la Revolución Naranja de 2004 la que hizo que Putin reconsiderara sus tácticas. Su candidato favorito para la presidencia de Ucrania, Viktor Yanukovych, fue derrocado por estar implicado en la manipulación de los resultados electorales.

 

 

 

Victor Yushchenko, un candidato de la oposición pro-occidental, llegó al poder en su lugar. Yushchenko fue envenenado durante la carrera electoral, pero sobrevivió para ocupar el cargo de presidente de Ucrania entre 2005 y 2010. Rusia fue culpada por el intento de envenenamiento.

 

Sin embargo, Rusia mantuvo el control sobre sectores clave. Las exportaciones de Ucrania todavía se dirigían principalmente a Rusia, los puestos de seguridad más altos los ocupaban personas con pasaportes rusos y dependía completamente del gas ruso: Ucrania había firmado un acuerdo de gas muy desfavorable en 2008, que la comprometía a ser el mayor comprador de gas ruso. , a un precio superior al de mercado.

 

 

Pero logró reactivarse cuando comenzó a cobrar peaje por el paso de los gasoductos en su territorio, llegando a recibir un 3.81% del Producto Bruto Interno, cantidad totalmente desproporcionada, que llevó a Rusia a construir un nuevo gasoducto que no pasara por el territorio.

 

Mientras tanto, la flota del Mar Negro de la armada rusa continuó teniendo su base en Crimea, con un acuerdo de 2010 que garantiza que permanecerá allí durante las próximas décadas. La neutralidad estaba incrustada en la constitución de Ucrania, ante la insistencia de Rusia, lo que impedía que Ucrania se uniera a la OTAN (actualmente Ucrania es socio de OTAN pero no miembro permanente).

 

 

 

Que quiere Rusia de Ucrania ?

Rusia tiene tres objetivos principales …

 

En primer lugar, se considera que Ucrania pertenece a la “esfera de influencia” rusa, un territorio más que un estado independiente. Se cree que Ucrania y Bielorrusia, como estados de la antigua Unión Soviética, forman una única nación histórica con Rusia. Nada más falso, como lo hemos visto històricamente.

 

 

Si Ucrania no puede ser completamente subyugada, debe permanecer inestable, débil, tóxica para las inversiones occidentales y no apta para ser miembro de ninguna alianza de seguridad colectiva, especialmente la OTAN.

 

Segundo, para solidificar su gobierno autocrático en casa. Putin quiere evitar el surgimiento de un sistema de gobierno alternativo y democrático en la frontera rusa. Una Ucrania inestable sirve como una lección para los rusos comunes: que la revolución conduce al desastre.

 

 

 

En tercer lugar, Putin usa a Ucrania para alimentar una narrativa más amplia de Rusia como una fortaleza sitiada por Occidente y que necesita un comandante en jefe fuerte para proteger su “civilización”.

 

En los medios rusos, el caos en Ucrania se presenta como parte de un proyecto occidental para socavar a Rusia, al igual que la situación en Bielorrusia.

 

Es una guerra de años …

… pero un conflicto armado de días …