Las consecuencias fueron trágicas, tanto por las vidas perdidas (de 4000 a 6000), como por los compatriotas desalojados de Honduras …

… alrededor de 115 000 que volvieron forzados a El Salvador, para convertirse, ahora en campesinos sin tierra y sin trabajo (recordemos que esfuerzos de Reforma Agraria no se darían en El Salvador hasta 1981, con resultados cuestionables).

El bombardeo a Toncontín y otras leyendas

De los muchos mitos, que surgieron de esta guerra fue el del bombardeo enviado por Sánchez Hernández, como repuesta al ataque del Poy, considerando que teníamos una aviación superior y con más recursos.

Esto es relativo, desde varios puntos de vista, Honduras por ejemplo, bombardeó el 14 de julio El Poy y en escaramuzas previas del 4 de julio, zonas norte del depto.. de Santa Ana, usando aviones de pasajeros (DC 3) de SAHSA, línea aérea comercial.

Si bien teníamos más aviones, 25 pilotos entrenados en USA, los sistemas de bombardeo eran muy precarios, tanto así que de las bombas lanzadas, solo una cayó en Toncontín (14 julio 18 10), y todo el resto en las vecinas Colonia Los Ángeles y Loarque. Lo cierto es que esta bomba si cayó en la pista e impidió el carreteo de aviones, o sea que la aviación hondureña quedó mermada un 80 % en su accionar. El bombardeo por sorpresa y de noche, sembró pánico en Tegucigalpa.

La infantería salvadoreña, mientras tanto, atacó simultáneamente por tres flancos, Norte, llegando a Nueva Ocotepeque (7 kms en territorio HON) Norte por Victoria, Cabañas y el avance por el Amatillo, donde nuestras tropas entraron francas hasta casi alcanzar Nacaome (18 kms dentro del territorio, donde fueron repelidos por el I Batallón de Infantería Hondureña y mantenidos cuatro días a nivel de trincheras por el Ejército catracho). Tegucigalpa dista más de 160 kms de Nacaome, o sea que aquello de que “casi alcanzamos Tegucigalpa”, falló por un poquito …

"Guerra de la legítima defensa” y algunas equivocaciones

En san Salvador se organizan marchas de apoyo y reclutamiento voluntario, estamos en la “Guerra de la Legítima defensa”, nos asiste el derecho de defendernos ! Los resultados serían marcadamente diferentes …

Mientras tanto, las acciones seguían, el 16 de julio dos aviones hondureños cruzaron espacio aéreo salvadoreño y atacaron con precisión las refinerías y depósitos de combustibles de Acajutla y Cutuco, contaban los catrachos que la humareda de la RASA en llamas podía verse desde Tegucigalpa (un tanto exagerado no ?).

En el “Teatro de Operaciones Sur” (alrededores de Nacaome), no había avance alguno de nuestras tropas, pero ni a los salvadoreños ni a los hondureños les llegaban aprovisionamientos de comida suficientes. Así que nuestros compatriotas se dedicaron al vandalismo y pillaje para comer.

Ambos ejércitos habían sido apertrechados por USA y la misma compañía de implementos de guerra, luego los uniformes eran idénticos, del mismo color, y solo los distinguía una línea blanca en las botas; se dio el caso de un robo de gallinas que hicieron soldados salvadoreños en la zona de El Aceituno, con sus “preseas” corrieron a refugiarse en medio de la noche a una tienda de campaña, que estaba llena de soldados …. Hondureños por supuesto.

La camaradería y el hambre los llevó a compartir las gallinas y marcharse en paz; probablemente lo más absurdo de esta guerra, sea que dos países, los más parecidos entre sí de Centroamérica, llegaran a esta guerra por intereses que en nada concernían a sus protagonistas … los muertos los pone el pueblo.

Aviones, matanzas y alto al fuego

En el frente Sur Occidental, donde las tropas salvadoreñas avanzaban de Ocotepeque a Santa Rosa de Copán, Honduras dispone un puente aéreo para trasladar tropas de Tegucigalpa a Santa Rosa, en aeronaves civiles.

Fidel Sánchez Hernández mandó a retroceder a estas tropas, por temor a un ataque aéreo y se repliegan detrás de nuestra frontera.

Un avión hondureño, que había transportado tropa hasta Occidente, es derribado, en medio de la noche, por la misma batería anti aérea de la FAH, desde Toncontín, en otro de los errores de guerra; el fuselaje podía verse en la Carretera del Sur cercano a Tegucigalpa en la década de los 80s.

 

Todas las tratativas que venían manteniéndose con mediación de OEA/ONU, se aceleran tratando de lograr un alto al fuego, sin resultado. El General Medrano (“Chele” Medrano ) mantenía férrea resistencia en las faldas del cordilleras del Merendón ante las fuerzas del Coronel Policarpo Paz García, que sería Jefe de Estado Honduras años más tarde.

Pero en su retirada, la matanza de San Rafael Mataras y el derribo de dos aviones Corsario salvadoreños por batería anti aérea, hacen que Sánchez Hernández, acepte al fin, el cese al fuego.

Este se define a las 20 00 horas del día 20 de julio, la “guerra de las 100 horas” había durado 158 horas, y si se dan cuenta …

… en ningún momento escribí sobre fútbol.