Ah hombres pecadores del mundo! Qué suerte tenemos de haber nacido en esta Patria inverosímil y de a ratos bastante bizarra, llamada El Salvador …
Donde nadie sabe nada, pero todos opinan de todo; donde en la era de la tecnología contamos votos a dedo; donde a diario nos extorsionan ministerios de Hacienda, bancos, despachos de abogados y eventualmente alguna mara; donde organizamos marchas “camuflageadas” por la paz pero no hacemos nada por combatir la violencia; donde ni selección de futbol tenemos pero armamos una rejunta y nos vamos a jugar contra el subcampeón del mundo, que cuenta con el mejor jugador del mundo … y que ?
En esta Patria linda, tenemos el chance de contar con un causal jurídico, que ningún país del mundo tiene, ni se atrevería (por dignidad, digo yo) a proclamar como tal … la “infidelidad responsable”.
O sea … hagamos de caso, a usted caballero, lo cachan en una cana al aire, ya no necesitamos aquellos argumentos de:
Sé muy bien que soy la única causa mi amor, de todos tus sufrimientos, justifico tus lamentos y te pido perdón a los cuatro vientos …
Olvídese de esas alharacas baratas, aquí en la tierra del “yo pasando iba …” ya tenemos el recurso jurídico/divino, que necesitamos …la “infidelidad responsable”.
No me voy a referir al caso que detona este concepto, porque a decir verdad, mezcla religión y política y es bastante complejo, a nivel de concepto de familia y sobre todo es la vida privada de dos personas que no conozco …. Tal vez la parte que salta y resalta, entre tantas malas noticias nacionales … es el uso del concepto de “Infidelidad responsable” …que ha venido a arrancarnos una sonrisa a los Salvadoreños en tiempos turbulentos.
O sea, pactamos del hecho que hombres y mujeres, que trabajan o se consagran a la religión, de cualquier creencia, de cualquier denominación, no dejan de ser seres humanos … y como tal, están sometidos a las tentaciones del género humano …
Nuestras cárceles tienen pastores acusados de delitos de violación, los tribunales eclesiásticos, casos de denuncia de pederastia, hay falsos profetas, hay lunáticos que han convencido a otros de ser Redentores o mesías … y han terminado en desastres (Jim Jones, Waco …etc.).
“Existe un concepto que escapa al conocimiento y cultura de los salvadoreños, es la infidelidad responsable, o sea la mayoría de los hombres tienen más de una pareja” (Abogado defensor del Pastor, además de infieles nos dijo ignorantes).
Pero bajo este concepto, según entiendo, ya no hay que mentirle m{as a la novia o esposa, simplemente uno asume la responsabilidad de la infidelidad y le anuncia a su pareja:
Será causal de libertad expedita ?
Exonerará de todo pecado ?
Por las dudas, no trate de hacer esto en casa ….
Estaba en el entierro de una persona, al parecer había fallecido de causas naturales, el cuerpo estaba tendido sobre el ataúd de madera color negro, lo habían vestido con un traje oscuro, la corbata estaba acorde con el traje, las manos habían sido puestas entrecruzadas sobre el pecho, no parecía que estaba muerto más bien parecía que estaba en un sueño muy profundo, varias coronas y arreglos florales estaban alrededor suyo, la imagen parecía de tranquilidad; varios parientes lloraban la muerte del difunto, miró a su alrededor y todos los asistentes vestían de color negro, le llamo la atención una señora ya anciana vestida toda de color blanco, se acercó donde ella y entablo comunicación, ésta al verlo le dijo:
Había prometido no cometer el error de salir los sábados de mi casa, al menos no por las tardes y mucho menos a un centro comercial. Pero la vida es una entrega permanente de principios, tal como pueden atestiguar los “cinco o seis voluntarios” (voluntarios convenientemente pagados) que siguen esos principios.
A veces me pongo a pensar mujer, que en mi vida tú no fuiste más que un Zeppelín.
Digo, por las circunstancias, pasadas y actuales, un zeppelín, de los que antes pasaban por sobre las ciudades y toda la gente salía a mirar, y que si hoy pasaran, también todos saldríamos a ver ... un zeppelín ... raros, escasos, pocos, infortunados o llenos de fortuna, no se ...
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