De pronto me dices que me necesitas,
y mis labios no tienen la respuesta ,
pero los latidos del corazón lo dicen todo,
por mi ....
De pronto me dices
“Te necesito”
y mi cuerpo tiembla de deseo
por cada una de tus palabras que
salen de esa boca,
Si esa boca que provoca
que me pierde, que me aloca,
que trae a mi mente tus besos,
tus caricias con esos labios
que me han perdido miles de veces
más en los silencios que en las realidades
más en mis fantasías que entre tus brazos.
De pronto con tu estilo propio,
con tu arte de seducción,
me atrapas me rindes y
dentro de mí ,sólo nace
el deseo de ser tuya una vez más
se apoderan estas ganas
que nunca tuvieron un punto final.
Y esto viene de pronto , y
me enciende de nuevo las luces
esas casi apagadas , por los vacíos,
y me voy dando cuenta que el gris
de mis días no es tan gris
porque aún dentro de mis rincones
estas tú, siempre tu
apretado a las ganas de mujer ,
que me enseñaste a sentir.
en tantas entregas , con algo más que placer.
De pronto me dices te necesito
y el deseo tiene destino de perfeccion,
el sonido de cada letra tiene el tono
de nuestra interminable seducción.
vuelve a decirme te necesito
y te llevo a tocar el cielo en una entrega
de mutua necesidad.
Si pasara una vez, cada de vez en cuando, sería una maravilla, pero no es así, es el diario trajinar de nosotros salvadoreños, en la capital de nuestro país.
Carlos y Cristal, ambos totales novatos en la materia, novios desde casi niños, llegaron al motel media hora antes de lo que ambos habían planeado.
Para conocer un poco más de este detectivesco personaje de mi invención, es bueno leer “Johnny Acetileno” http://danielrucks.com/~danielru/index.php/cuento-breve/1386-johnny-acetileno en este mismo blog.