El mediocre, el que no se esfuerza, calienta, ni altera por nada, no agrega, no suma ni resta, es un cero a la izquierda … en ámbitos laborales, grupos de “x” o “y” connotación, esta comarca está llena de estos especímenes.
Son los cultores del típico “irla pasando”, “ahí dale al como salga”, aplicando la Ley del Menor Esfuerzo posible, es el que jamás va a salir de donde se encuentra, va a morir en esa condición, porque jamás va a mover un dedo para trascender, ni hacer algo que implique una iniciativa ni nada similar, del típico decir de nuestras abuelas “el que nació para maceta no pasa del corredor”.
No hace nada, pero navega con bandera de pendejo en las tormentas, vendavales empresariales o institucionales, y como “buen gato”, que ésa es su condición, siempre cae parado, así la van llevando. Hay recorte de personal y siempre queda, por su eficiencia o lealtad ?, no, simplemente porque ”no molesta”.
Es el típico dundo, y es, a la vista inofensivo, sin embargo, el mediocre presenta a nuestro Reino dos grandes problemas:
Voy a empezar por b) antes de a), primero porque soy irreverente y segundo porque me da la gana. Los casi cinco mil millones de dólares que ingresan a El Salv … perdón, a la comarca, han disparado la tendencia a la mediocridad de nuestro país (reino).
Porque claro, para que vas a romperte el lomo si tenés uno o dos parientes rompiéndoselo por vos, en los Iunai, si los $ 400. 00 que te lleguen a fin de mes, te sirven para cubrir tus gastos y con lo que ganás en tu trabajo … podés darte unos gustitos (las birrias del finde, el celular más avanzado, el guau!! Aunque rara vez el mediocre tiene alguien a quien hablarle o lo que es peor, que le hablen, porque su propia mediocridad lo va aislando de toda iniciativa).
Entonces se multiplican, reproducen como conejos, invaden todo como el musgo de junio y julio, son cada vez más y echan por tierra el típico sonsonete de “que buenos trabajadores y como se esmeran en sus labores los demás que tranakam con ellos (Woops !)”.
Ahora bien, vamos al inciso a) que dejamos por fuera, los mediocres, a fuerza de honrar su inacción, hablan, especulan, hacen el mal sin mirar a cual, se pasean en la reputación de quien quiera sea, solo por el afán de pasearse en el prójimo, aunque por lo general, atacan más a la prójima,
Son los que en una oficina siempre están enterados de todo, es más cuando el jefe o jefes necesitan información llaman bien claro “Llamate a Viviana, que ésa se entera de todo y nos va a decir”,”Decile a Jiménez que venga, ése debe saber si es cierto esto”, por lo cual los mediocres pasan a engrosar las filas de los “alientos de escroto” (solo imagínense ustedes a que actividad se dedica una persona así denominada para hacerse una idea).
La mediocridad del mediocre no es directamente proporcional a su calificación académica, pueden tener dos carreras, un MBA, haber estudiado en las mejores Universidades del país y extranjero y no salir de la mediocridad, lo que hace la diferencia es el esfuerzo, la iniciativa, en un reino como Valetodo lleno de problemólogos, actuar de solucionólogos , atacar el nudo del asunto, no dejar que el asunto te atropelle, mucho menos “dejá el asunto así, de alguna manera se va a solucionar”, no !, salir de la mediocridad que nos apabulla, requiere gente con iniciativa, con ganas de trabajar, con un mínimo de cultura general (lo que descarta de entrada a todos los diputados), suficiente para agarrar un lápiz y un papel y esbozar un proyecto de soluciones …
De mediocres estamos a rebasar, identifíquelos Ud. mismo, atesoremos la iniciativa como bandera, volvamos a ponerle el hombro a nuestra Patria .. como lo hacíamos cuando no se nos aniquilaba el cerebro con las redes sociales.
Porque a El Salvador, compatriotas, o lo sacamos del hoyo entre todos, o nos hundimos con él.
Después de un día agitado en la universidad, me subí a mi cacharrito de cuatro ruedas sin saber muy bien a donde ir, era muy tarde para seguir en la Universidad, y muy temprano para irme a casa, platicar con mis padres, cenar, ver TV, y dormirme a las 10 00 pm.
«El castellano es el idioma común que nos desune» (Jorge Edwards Valdés. Crítico literario. Chile)
Basta! Nos estafan a diario, los extorsionistas, abogados, diputados (básicamente todos de la misma gens), los bancos, las 12 cuotas sin intereses, el galón de gasolina y Hacienda … los salvadoreños no soportamos una estafa más !