Vamos con la CICIES
Y con la NONOES
aunque algunas veces
también las TALVEZESES
Usted vive en un palacio
Yo en una choza unifamiliar
justo al borde de una cárcava
que cada día crece más …
Yo no envidio su palacio
La envidia no está en mi ser
pero si tengo derecho
a vivir igual que usted
Vamos con la CICIES …
La CICIES es una cosa
que nadie sabe bien que es
pero que hay mucho malacate suelto
eso bien lo sabe usted
Que no toquen la Asamblea
dicen de la Patria sus papás
porque si los investigan
no hacen quorum nunca más
Queda desierto el salón Azul
y se toparía Mariona
con más gente que el 2 x 1
de septiembre en Mr. Donuts
Vamos con la CICIES
Pero hay algo que me huele mal
que empiecen con los perdones
que queden con chamba los agresores
ahí empiezan la TALVEZESES …
Al bote cualquier tamal
que sea del color que sea
pariente de quien sea
nada de TALVEZESES …
Vamos con la CICIES
Usted vive en un palacio
Y yo tengo que alquilar
por la mamasada de impuestos
que le tengo que pagar …
Yo no envidio su Palacio
Pero no puedo entender
como el pisto de mis impuestos …
lo administra Usted !!
Me costó trabajo, en serio, me reventé el alma y dejé lo poco que quedaba de mí en el empeño, pero al fin lo conseguí, y después de arduas jornadas de mirar al cielo, logré capturar una nube…
El dueño de la calle (Parada, Agustín Marcelo) terminó de sacar el papelito del bols y le tocò el “1” o sea, iba de primero, rompiendo camino con la Suburban Negra, blindada, sin placas, una de las cuatro que integraban la “caravana de la muerte” del Funcionario.
Yo era un grano de arena, cualquiera, uno tan solo, entre los millardos de granos de arena de una playa de las múltiples playas del planeta.