En todas estas cuestiones de amores, y amores eran lo de antes … podemos con mucha licencia, echar un vistazo a una de las historias de amor más grandes de la mitología griega, leerla y volver a ver nuestra realidad … hoy.
Vamos al caso de Orfeo y Eurídice … Resulta que Orfeo, un héroe de la mitología griega, después de mil peripecias, se refugia en Tracia, allí conoce a una ninfa del bosque, Eurídice, se enamoran y se casan …
Eurídice, a pesar de ser ya miembro de la corte, sigue visitando por las noches el bosque y a sus compañeras ninfas; en una de esas visitas, Eurídice se encuentra con un cazador, que persigue un ciervo. Eurídice se niega a indicarle el camino por el que ha huido el ciervo, para protegerlo y el cazador se enfurece con ella, aquí se revela que el tal cazador es Aristeo, el dios de los cazadores y pide un beso de Eurídice para sentirse menos agraviado. Ella se niega y huye de él. Aristeo la persigue y, en la persecución, Eurídice es mordida por una serpiente
Orfeo, cantante, músico y poeta, con una lira en el hombro, afligido por el dolor, descendió al inframundo decidido a restaurarla a la mortalidad.
Le suplicó a Plutón y Proserpina por su regreso y su elocuencia "derritió los corazones de los dioses y los habitantes del inframundo, y todo quedó en silencio". Incluso Cerberus (Cerbero), el feroz perro de tres cabezas que vigila las puertas del infierno, yace mansamente a los pies de Proserpina … por lo que le permite a Orfeo pasar.
Los dioses aceptaron el regreso de Eurídice: Proserpina sin duda simpatizante al recordar su propio secuestro forzado por Plutón. La única advertencia era que Orfeo no debía mirar hacia atrás a Eurídice hasta que estuviera segura en el mundo superior. Si él rompía su palabra, ella descendería una vez más al Infierno.
Al abandonar el inframundo, los amantes ascendieron por un sendero empinado y brumoso y, al acercarse al borde de la tierra, un Orfeo ansioso miró a su novia, que cayó y murmuró una despedida final antes de morir de nuevo. "Ningún reproche pasó por sus labios", según Ovidio en su Metamorfosis, porque Eurídice ahora sabía con certeza que Orfeo la amaba incondicionalmente ….
Es lindo? O no es lindo? Es lindo !
Ahora veamos nuestra realidad, puesta hoy, en este año y en estas condiciones …
*Orfeo, de alta clase, conservadora y elitista, Eurídice plebeya del bosque … le darían permiso de casarse así nomás …con “esa”?
*Eurídice, decide irse a ver a las “amiguitas” al bosque, recién casada, Orfeo, macho alfa … le daría permiso de irse sola tan seguido por las noches? No andaría con el “controlín” llamando cada 5 minutos al celular de Eurídice?
* Eurídice, por salvar a un ciervo, arriesgaría su vida o se iría a Twitter e Instagram a fundar notorias cuentas de Sociedad Protectora de Animales?
*Aristeo, guapo cazador, y además dios, no haría tambalear hoy en día la férrea fidelidad de Eurídice?
*Orfeo, recientemente viudo y con amplio universo de volver a contraer nupcias …se arriesgaría hoy a volver a bajar a los infiernos a revivir a su amada?
*Iría solo, sin guardaespaldas y cuatro blindadas de escolta?
*El Can Cerbero, feroz perro de tres cabezas, vigilante del inframundo, lo dejaría pasar tan fácil? le pediría mordida? O lo sacaría a patadas tipo Chapultepec?
* Cuando logra sacarla del inframundo … y rescatarla de la muerte, Orfeo la vuelve a mandar allá porque se da vuelta para mirar su belleza … la belleza de su esposa, como así cuando en tiempos actuales todos andamos viendo para lados diferentes de donde está nuestro cónyugue?
* Eurídice, vuelve a morir feliz, porque sabe que su amor es sincero … hoy en día nos reclamarían … “pedazo de pasmado, no te dije que miraras para adelante, so pedazo de bruto? Ahora ya estuvo ….”
No, no, no … amores eran los de antes.
Siguiendo con el estudio del Fisiólogo Jeffrey Pon T.S. Condom, de la Universidad Angry Birds de Pasadena, debemos decir que este ensayo se vio enriquecido por el aporte del famoso criminólogo Ferdinand Al Bote, quien conociendo la clase y tipología de presos en cárceles del mundo planteó que un equipo de fútbol, básicamente debía componerse de criminales:
El profesor, veterano y retirado, con una pensión miserable, encuentra el regocijo entre tantas y tantas memorias de sus épocas de docencia.
Creo que las noches frías traen consigo caricias de melancolía, que el masoquismo es una prueba de amor sincero, que no hay propuestas decentes en una mirada indecorosa, que el olvido es una excusa que no existe. Creo en el dialecto de las miradas, en los poetas sin musas, en los “para siempre” aunque siempre terminen. Creo que las manos tienen su lenguaje en las caricias, que la luz roja del semáforo está diseñada exclusivamente para besar a la persona que amamos, que no hay abrazo de despedida que no se lleven un poquito de uno.