Lanzo una botella al mar
recurso de náufrago
para que llegue donde estás
se acerque a tu orilla
esa que moja tus pies
mientras sueñas
te empeñas
te adueñas
de las múltiples nostalgias …
Para que puedas encontrar
al despertar,
de la vida todo el remedio
todas las curas
las soluciones
paliativos y ungüentos
para todo aquello que te hace llorar ...
Melancolía y caracoles
nocturnos vientos rompecielos
quiero secarte una lágrima
quiero susurrarte un te quiero.
Más si no tengo tus labios
cercanos a mi tiempo
coordenadas y sueños
desesperanza en mi planisferio
teléfono que nunca suena
guitarra compañera vieja ...
Y aún así, como te quiero pequeña…
Lanzo una botella al mar
recurso de náufrago
para que al despertar … vida
puedas encontrar
moluscos, enhorabuenas y mis razones
para susurrar
no importa …
seguimos existiendo
aun te amo…
te sigo queriendo …
Pablo lo esperaba en la mesa desde hacía unos minutos, lo vio llegar, más destrozado que nunca … al encuentro en el café de siempre.
No es tan simple como “tómese dos aspirinas y vuelva mañana”, mucho menos, “tómese este té y rece tres Padrenuestros” en el Siglo XIII, se trata de epidemias masivas que nos han afectado a lo largo del tiempo.
Cuando la silla Vaticana queda vacante, o se celebra un aniversario papal, todos los ojos se vuelven al intrincado mundo de la elección del nuevo sucesor de San Pedro, surgen preguntas, buceos en la historia, y más de uno me ha preguntado en estos días … mirá chele, hubo un papa mujer ? quien fue la Papisa Juana ? Existió o es simple mito ? Porque la Iglesia Católica no la enumera en su listado oficial de papas … ?