Linda Napolitano era una típica ama de casa que vivía en Manhattan con su esposo y sus dos hijos. Pero todo cambió el 30 de noviembre de 1989, cuando afirma que tres criaturas bípedas grises la secuestraron en su apartamento del piso 12.
Sí: yo sé que por esta época hay un exceso de planes: firmar un acuerdo nacional (unilateral, por supuesto), mirar partidos de la selección, verlos perder otra vez, conseguir boletos del próximo artista que venga, ufa!
Vuelven las marchas Blancas!
Roma no se hizo en un día, ni maduran en 24 horas las sandías, se te cayó la estantería, y eso te sume en agonía, fatiga, tranquila, tratemos el asunto con asepsia, basta de turbulencias, flatulencias, clemencia, conciencia … tené paciencia, Hortensia …
“Sacame de esto Chele, sacame – me dijo con su rostro ya desfigurado aquel amigo – sácame de esto y salvame, estoy podrido por dentro, tengo el cuerpo lleno del más letal de todos los venenos”.
Este siglo XXI y en particular estos últimos años, se han caracterizado por el ascenso a las primeras magistraturas o puestos de decisión política, por medios democráticos y constitucionales que en todo el siglo XX.
Cualquiera que se tome el trabajo de revisar la historia de nuestro glorioso Luis Ángel Firpo, pero hacerlo en serio, no a la ligera, nada de revisaditas de Wikipedia, sino nuestra verdadera historia
Yo era un fulano de lo más soltero, de vocación soltero, es más …soltero fundamentalista ! Hasta mi DUI decía soltero … imagínense!