Sí: yo sé que por esta época hay un exceso de planes: firmar un acuerdo nacional (unilateral, por supuesto), mirar partidos de la selección, verlos perder otra vez, conseguir boletos del próximo artista que venga, ufa!
Vuelven las marchas Blancas!
Quedamos en reunirnos con un viejo compañero de la primaria que no veía desde los años ochenta, el “Gordo” Peláez, del que tuve noticias a través de una red social. Nos citamos en un bar, nos palmeamos con cariño falso, pedimos unas cervezas.
Es un hecho que, por lo general, les paramos poca bola, ya salen al final de misa, cuando el sacerdote ha hablado hasta la saciedad de temas relacionados con cualquier cosa menos con el evangelio del día, (por lo general hablan de si mismos, y buscan elevarse a vicarios aunque sea, además de organizar colectas) y una señora, voluntaria, o algún caballero con el afán de ayudar comienzan a leer los avisos parroquiales … Otros se pegan en pizarra, y son algo así como la "Gaceta de chambres del vecindario".
Muchos marxistas, si lo hubieran conocido, o al menos leído, alguna vez, mientras repiten panfletos de memoria, alguna obra de Marx (muchos en nuestro país se declaran marxistas sin haber leído “El Capital” ni "El Manifiesto ..." en su vida) jamás se hubieran declarado marxistas.
La reina Casiopea era una mujer mortal de la mitología griega, conocida por enfadar al dios del mar y los terremotos, Poseidón (en la mitología griega se pasan dando duro los mortales con los dioses y viceversa, sobre todo viceversa ,,,,).