-
Ánimo muchachos – voceó el Ing. Redondo – siento oxígeno, percibo una entrada de aire, no debemos estar lejos.
El problema de los salvadoreños es que pasamos mucho tiempo ocupados haciendo nada, pero tratando de hacer creer a los otros de que estamos extremadamente atareados.
Don Nispero Vestales venía cabalgando al trote lento con su caballo viejo, se moría la tarde, venía de ver su terrenito (cuatro manzanas de granos básicos, pero si la sequía no lo jodía mucho daba para vivir).
Ahhhhh malpensados ! Mentes cochambrosas, ustedes creían que esto se iba a tratar de que alguien se dedicaba a impúdicamente a poner sus dedos sobre ciertas representantes del sexo femenino de muy buen ver ?
Resulta que hoy todos somos catalanes, a excepción de aquellos que le van al Real Madrid, el culto a Messi y compañía nos ha llevado a un “barcelonismo desmedido” que se sobrepone a nuestras propias usanzas nacionales.
Doctor, Doctor… necesito su ayuda, necesito que haga algo por mí…
No es ningún pleonasmo, ni asunto de sarcasmo, los dos la vimos de lejos, a ambos nos gustó; no somos degenerados, no somos escandinavos, a todos les gusta el pescado, pero a pocos el atún …
Mi nombre es Horacio, naaaa …la verdad es que no es Horacio, podría ser Ovidio, Heliogábalo, Marsupial en Celo, digamos Hipólito, lo que ustedes quieran …escribo de incógnito …
El burlón, bromista, el “enganchador”, el que goza metiéndole una mentira a “x” hasta que “x” se avive y se de cuenta que eso es imposible y todos se maten de risa … los que ejercen la tomadura de pelo como vocación ….
Allá por el Siglo XVI, si hay algo de lo que podemos tener certeza, es que a Don Michel de Nostradamus, le sobraba bastante el tiempo …