Japón, un país magnifico y sobre todo bellísimo en cuanto a tradición, educación, cultura, siempre tuvo, y aun más en la época Imperial (varios períodos) una marcada tendencia a dejar en tercer y cuarto orden, el rol de las mujeres …


El mundo ha vivido equivocado, el viejo dictamen de la caída del Muro de Berlín y dejando a Occidente como ganador de la Guerra Fría.... Ganó Gorbachov y el viejo pensamiento de la sociedad igualitaria, sin dinero y con subsidios.
Julia pudo no haber dado a luz a su hijo, los standards de vida Victoriana y ultra conservadores, de 1940 en Inglaterra, no concebían la idea de que una muchacha soltera …resultara embarazada, así por así, y menos aún, de uno de los tantos marineros que recalaban en el puerto de Liverpool.


Creo que las noches frías traen consigo caricias de melancolía, que el masoquismo es una prueba de amor sincero, que no hay propuestas decentes en una mirada indecorosa, que el olvido es una excusa que no existe. Creo en el dialecto de las miradas, en los poetas sin musas, en los “para siempre” aunque siempre terminen. Creo que las manos tienen su lenguaje en las caricias, que la luz roja del semáforo está diseñada exclusivamente para besar a la persona que amamos, que no hay abrazo de despedida que no se lleven un poquito de uno.