Hace un par de horas, mis compañeras y yo, invitadas sin permiso a su casa, le hemos visto pasar, llevando en sus manos un veneno para hormigas (o sea, para nosotras).
Me decidí a aceptar el programa de testigo criteriado, y denunciar cara a cara al poderoso magnate Oliverio Carpio Carpio III, por varias razones …
Yo persisto, insisto, desvisto … luego existo; pero existo, no desisto, sigo mi rosa de los vientos, con intentos de nunca desviarme del lado iluminado de mis tiempos …
Creo que todo empieza con la celebración de nuestro último aniversario, estábamos en un restaurante y de pronto, de la nada, vi una reacción rara en tu cara, una mirada que no me pertenecía. Ingenuo como suelo ser, seguí la línea de tus ojos y justo entraba un fulano al lugar, quien no sé quién es … ni conozco … pregunto inocentemente …
Hubiera sido eso, simplemente, una fotografía en el periódico, con un pie de página cualquiera, de los que hablan de cualquier conflicto empresarial o análisis financiero del país, porque ahí apareció, en finanzas, no en espectáculos ni en la lista de morosos ... no, en finanzas y negocios ...
“Clack Clack es el ruido que me hace el carro cuando freno” dijo la señora a su esposo
He escuchado decir que cuando estás a punto de morir te pasa toda tu vida por delante. Pues aun no me ha dado por morirme por iniciativa propia, pero descubrí que no es el único momento cuando esto pasa... el otro día mi novia me llamó:
Los hermanos Wright
Con razón o no, Wilbur y Orville Wright han pasado a la historia como los inventores del avión, un artilugio que cambiaría el rostro de las relaciones internacionales, la guerra, el comercio y el turismo.
Mis hijos, de vacaciones y dedicados al ocio, con sobredosis de TV (Grande Cerati !), al llegar a casa, tarde en la noche y agotado, me reciben con la pregunta …