Dijo “no quiero”, se envolvió en mil mantas a pesar del calor y en medio de la oscuridad me quedé con la visión de su cabellera larga escondida en medio de una frontera de almohadas …
Hay muchas canciones bellas para las madres en su día, para padres, muy pocas, en lo particular, este tema de Harry Chapin, de 1973, siempre me impactó … me atrevo a traducirla, el mensaje es vital para este día.
Tengo un gato que asumo como amigo, medio loco,
maullando en mi tejado.
El amanecer del tercer día de la creación,
debió ser algo muy parecido a éste …
Has quedado en el silencio de mi piel
En la mirada perdida, donde se fue tu rostro;
No importa mujer, que el vendaval del mundo te distraiga de tus sentimientos y aparezca un momento de olvido, en el cual las palabras de amor suelen no surgir o si lo hacen, parecen vacías y sin sentido ...
Por extraña transmutación, terminé convertido en un grano de arena, cualquiera, en una playa de las múltiples playas del planeta.
Éramos una cofradía de pre púberes revoltosos, terror de la escuela, pánico de la colonia, pero en la manera que se era revoltoso con 11 años y en los 70´s o sea, nuestros máximos delitos eran tocar el timbre de una casa y salir corriendo hasta la esquina ..
“Murió haciendo señas y nadie lo entendió…”
(Magaldi y Pesce letra del tango “El Penado 14”).
Un día de estos, hace años ya, unos cuantos a decir verdad, estando con toda la familia en misa, esas misas para niños que ponen a los chiquitos adelante y el sacerdote que no se las quiere tirar de el “Steve Jobs de la teología” habla en lenguaje coloquial, Monseñor Delgado (que lo maneja muy bien) trataba de explicar a los niños las diferencias entre el cielo y el infierno, el bien y el mal, entre “arriba y abajo”, empezó a preguntar a los niños si preferían ir “arriba o abajo”.