La cabeza del fútbol salvadoreño, vive mirándose el ombligo. Eso hace las ocho (8?) horas laborales del día … nada más.
La culpa la tuvo mi madre, Ai – Nozomi, venerable anciana a quien se le metió en su obstinada cabeza de campesina japonesa, viuda, con seis hijos varones (mis hermanos), que en lugar de sembrar arroz en los pantanos, había que fabricar micro chips en la mesa del comedor.
Fue un pequeño desliz del Sr. Ministro de Comercio Exterior y Buena Letra de aquel pequeño país, en aquel año 2019, pequeño, insignificante error, pero de enormes beneficios y muy bien anotado y reportado por la Prensa, primero Nacional y de inmediato Internacional.
Parece mentira, amanece el 2024, y en un año más habremos alcanzado el primer cuarto de este nuevo siglo ..
Grave la situación en el Reino de Valetodo, mientras el Rey Vacilo II se dedica a cazar moscas contra una ventana, tratan así de mantenerlo entretenido la mayor cantidad de tiempo posible...