Augusto en Agosto (que todavía no se llamaba como tal sino Sextil, y de eso se trata esa historia), se regodeaba en su reclinatorio en el Palacio Palatino, refrescándose sus imperiales gónadas con hojas de palma que batían esclavos y esclavas númidas (por las dudas, nunca se supo bien para que lado pateaba el tal Octavio Augusto).
Con el pasar de los años nos vamos dando cuenta de la inminente verdad, sobre como nacimos originales y moriremos siendo copias, lo digo porque recuerdo que hace algunos años acompañé a mi padre a nuestro coloso (Estadio Cuscatlán).
Ya lo habíamos expuesto antes en este blog, es lamentable, el Reino de Valetodo, este país que amamos, donde cada quien hace lo que le da la gana y nadie hace o dice nada, cambia de Rey pero la Corte siguen siendo los maleantes de siempre.
Complicado, pero cierto, algunos aciertos en el área de administración, presupuestos que no eran necesariamente de su área, hizo que la ascendieran (de nivel de trabajo) y se sobre saturara del mismo… eso le pasó a Georgina en la empresa transnacional para la que trabajaba.
Carta de Edison a Candelaria de Luz …
Lo que hoy es tan sencillo, simplemente apretar un tubo del que obtenemos la cantidad exacta que necesitamos para mantener nuestros dientes sanos y limpios, hace siglos tuvo su larga historia y variantes.