Todavía los países del Sur de América convulsionaban, era la época del caudillismo, la pasión desplegada en los campos de batalla se trasladó a los campos de fútbol, con métodos por lo general menos violentos.
Alejandro Scopelli; Enrique Guaita y Andrés Stagnaro, formaron parte de la selección Argentina que ganó el Campeonato Sudamericano (hoy Copa América) en 1929.
Por incongruente que pueda parecer, por zafado de la realidad e ilógico que suene … ningún país campeón de la Copa América, ganó el Campeonato Mundial siguiente tras llegar a levantar el máximo trofeo Sudamericano …
Muy similar al caso de nuestro recordado Oscar Alberto Quiteño, quien encontró la muerte salvando su portería en la grama del estadio que hoy lleva su nombre (Ver en este mismo blog ....)
http://www.danielrucks.com/index.php/deportes/41-vida-y-muerte-de-oscar-quiteno
Otra vez … noche de sábado y que más da? De nuevo se vuelcan las cervezas en las tambaleantes mesas improvisadas de las ventas de la Plaza y alrededores, acomodadas en la calle, donde la ciudad llora lágrimas y las confunde con el sudor en Usulután …
Han pasado 61 años. Acababan de ganar, el día 5 de febrero, el partido contra el Estrella Roja de Belgrado , el partido no fue fácil. Habían llegado a Belgrado con tan sólo un gol de ventaja después del partido en casa, lo que no era usual para ese Manchester United.
De la Historia se originan las leyendas y las leyendas dan origen a la Historia, y en otros casos, Historia y leyenda se conjugan en un suceso en común, una guerra y un esférico en disputa: una número 5 de gajos de cuero.
Ya lo habíamos expuesto antes en este blog, es lamentable, el Reino de Valetodo, este país que amamos, donde cada quien hace lo que le da la gana y nadie hace o dice nada, cambia de Rey pero la Corte siguen siendo los maleantes de siempre.
La oscuridad no le preocupa. Le preocupa la luz. La oscuridad es solamente ausencia de luz. Pero la ausencia sí le preocupa. La preocupación no. Le es indiferente. Sin embargo, la indiferencia, a Ana le preocupa muchísimo.