
Augusto, a gusto en Agosto (que todavía no se llamaba como tal sino Sextil, y de eso se trata esa historia), se regodeaba en su reclinatorio en el Palacio Palatino, refrescándose sus imperiales gónadas con hojas de palma que batían esclavos y esclavas númidas (por las dudas, nunca se supo bien para que lado pateaba el tal Octavio Augusto).

Últimamente, la exhibición en film de un nuevo “remake” de “The greatest show on earth”, el 2017, con la historia de PT Barnum, y sus famosos “show de variedades” caracterizados por la muestra – bastante cruel y despiadada – de fenómenos genéticos como atractivos … revivió el tema.

Tal vez (y hasta quitándole el “tal vez” sirve) es una de esas cosas que surgen con los años, como el reumatismo, la temblazón de manos, la disfunción eréctil o las canas ...

Soy telenófobo (fobia a los teléfonos), los detesto, todos ellos, fijos, móviles, de cabina (que ya ni hay porque se los robaron) todos y cada uno de esos pedazos de fibra de vidrio que hoy pretenden ser más inteligentes que nosotros mismos, son objeto de mi oprobio.